ONU alcanza paridad de género en sus altos cargos
El Foro Económico Mundial señaló en su último informe que se necesitarán más de 135 años para cerrar la brecha de género en todo el mundo, un aumento de 35 años desde la pandemia de COVID-19.
Naciones Unidas ha logrado la paridad de género en sus altos cargos dos años de lo previsto, según ha informado este martes el secretario general, António Guterres, que ha destacado que el organismo está «en una trayectoria muy positiva» para lograr la igualdad de género en la totalidad del sistema de la ONU.
En un evento paralelo del sexagésimo sexto período de sesiones de la Comisión de la Condición Jurídica y Social de la Mujer, Guterres ha detallado que, de continuar con el actual ritmo, el Secretariado de la Organización lo alcanzará en el segundo trimestre de 2027, unos meses antes de la meta inicial estimada en el 2028.
El secretario general de la ONU ha resaltado que su estrategia para lograr la equidad «está funcionando», pero ha lamentado que, pese al avance en muchas de las sedes de Naciones Unidas, los avances sobre el terreno son «más lentos» y «desiguales».
En concreto, el personal civil femenino en las operaciones de paz sólo alcanza el 32 por ciento, frente al 68 por ciento de hombres, pero se trata de una ligera mejora respecto a 2027, cuando las mujeres sólo representaban el 28 por ciento del total.
«Pero, en algunas misiones, las mujeres representan sólo una carta parte de nuestro componente de personal internacional», ha lamentado Guterres, que ha indicado que a la ONU «le interesa cambiar estas cifras». «Nuestras operaciones de paz, así como las personas a las que sirven, se beneficiarán de las perspectivas y la experiencia que aporta nuestro personal femenino», ha considerado.
Para lograrlo, ha señalado la necesidad de «aumentar y potenciar» los esfuerzos para «animar y atraer» a más mujeres a los puestos sobre el terreno, mediante la creación de una cultura laboral y unas condiciones de vida en las misiones que favorezcan a todo el personal.
La primera de las tres medidas en este apartado que el secretario general ya puso en marcha fue el aumento del porcentaje de mujeres en la cúpula directiva de las operaciones sobre el terreno. «Por primera vez en la historia de Naciones Unidas, alcanzamos la paridad a nivel de jefes y responsables adjuntos de operaciones de paz en 2021», ha explicado.
«La estrategia que lanzamos en 2018 para avanzar en la paridad en nuestro personal uniformado también está dando resultados. Entre 2018 y 2021, el número de mujeres oficiales de estado mayor y expertos aumentó del 8 al 20 por ciento, y el personal femenino del 20 al 30 por ciento», ha especificado.
Las otras dos fueron la actualización de las Medidas Especiales Temporales para lograr la paridad de género y la adopción de medidas para identificar candidatas cualificadas que sustituyan a muchos de los casi 4.000 funcionarios que se jubilarán en los próximos nueve años, la mayoría de ellos hombres.
«NECESIDAD, NO AÑADIDO»
Guterres ha recordado que el planeta está dominado por una cultura masculina y las estructuras de poder están dominadas por los hombres. «El patriarcado no es fácil de derrotar», ha lamentado, remarcando que lucha «contra los derechos de las mujeres y las niñas en todos los ámbitos de la vida, en todas las regiones del mundo». «Tenemos que hacer frente a este retroceso», ha pedido.
La resistencia, a su juicio, no es sólo «una cuestión de Derechos Humanos básicos que tienen todas las mujeres y niñas», sino que es el «único camino hacia el mundo pacífico, igualitario, sostenible y próspero que todos queremos construir».
Por ello, ha aseverado que la igualdad de género es «una necesidad absoluta, no un añadido», que representa la piedra angular de la promesa efectuada en la Cuarta Conferencia Mundial sobre la Mujer, celebrada en Pekín en 1995.
PREOCUPACIONES DE ESTADOS MIEMBRO
Algunos Estados miembro han manifestado preocupación por que la atención a la paridad de género vaya en detrimento del aumento de una representación geográfica equitativa. Ante ello, Guterres ha manifestado que se persiguen ambos objetivos «de forma complementaria y global».
«Nuestra capacidad para ejecutar los diversos y complejos mandatos se verá reforzará significativamente si nuestra plantilla tiene un equilibrio de género y se contrata a partir de una base geográfica más amplia, incluyendo a los países no representados o infrarrepresentados», ha explicado.
Sin embargo, ha dicho que, para lograrlo, precisa la ayuda de los Estados miembros, que pueden colaborar de diferentes formas. «Pueden demostrarlo apoyando a las candidatas a nivel nacional y colaborando con nosotros para identificar y atraer a mujeres de todos los orígenes, incluido el personal uniformado, para que trabajen en las Naciones Unidas», ha sugerido.
«También pueden apoyar nuestros esfuerzos mediante su participación en los órganos intergubernamentales», ha continuado, antes de recordar que «lograr la paridad de género en Naciones Unidas es un esfuerzo colectivo».
El Foro Económico Mundial señaló en su último informe que se necesitarán más de 135 años para cerrar la brecha de género en todo el mundo, un aumento de 35 años desde la pandemia de COVID-19. (Europa Press)