El misterio de los días: el nuevo libro de Gloria Liberman entrega claves para sanar y reinventar la vida cada día
"Dicen los sabios que cada día tiene un misterio y que la persona que logra descubrirlos encuentra el camino de la felicidad", explica la autora.
Gloria Liberman es una reconocida escritora, investigadora, terapeuta y ancestróloga. Autora de varios libros, esta vez, en El misterio de los días. Claves para sanar y reinventar la vida (Catalonia) realiza la escritura de una serie de experiencias sucedidas a lo largo de varios años donde pasa de narrar viajes personales a compartir su desarrollo emocional y espiritual.
«El viaje más importante que una persona puede hacer en su vida es hacia el encuentro consigo misma», destaca Liberman, quien recuerda su pasado, sus orígenes y también rememora a los miembros de su familia, quienes construyeron su presente: una vida que, como en un espejo, se refleja en la historia dando señales para el futuro.
Liberman narra también sus años en Kenia, África, entre tribus y leones. Allí convivió con otras comunidades y culturas. «Los sabios antiguos decían que ser feliz era una obligación», destaca Gloria Liberman y agrega «el camino está lleno de señales. En un mundo luminoso la oscuridad deja de existir».
Somos herederos del amor de muchas personas que vivieron antes que nosotros, sin embargo, a veces nos sentimos incompletos, como si algo faltara.
«Este libro se basa en hechos reales. En mi peregrinaje por el mundo he sido una buscadora eterna, desde el sentido de mi propia vida, los pensamientos y sentimientos, las múltiples caras del ser humano hasta la escarcha, que puede cubrir un corazón. Abismada de ver los contrastes de la existencia en cada rostro que conocí, en cada fragmento de respiración, a veces dolida por cada historia, otras con sol radiante en la alegría de haber entendido un poco más, quizás haber descubierto el brillo de mis ojos a través del espejo que nunca quise mirar. Así descubrí una parte del misterio de los días y les dedico estas palabras a todos los buscadores y buscadoras de respuestas, del oro interior. (Gloria Liberman)