Capas de madera muestran cómo se defiende el cuerpo humano
La exposición de la artista Sol Guillon se inspira en el cuerpo humano, su capacidad de defenderse y sanar. La muestra presenta obras con capas de madera, perforaciones y colores que aluden a la recuperación tras la pandemia.
Las implicancias físicas y emocionales, la salud y el cómo se defiende nuestro organismo tras la pandemia, inspiraron la nueva muestra que presentará la artista visual chilena Sol Guillon en GAM desde el 16 de marzo.
El título de la muestra, «Sana, sana, potito de rana», alude a la frase que se dice a los niños, a modo de mantra sanador para consolar las heridas que aquejan, aquella musicalidad auditiva que calma el dolor por la fricción.
Del mismo modo, esta muestra, inspirada en el organismo humano y su mecánica de defensa y protección contra virus o enfermedades, pretende sorprender y encantar con imágenes que aluden al interior humano, células, ADN o procesos que sanan y protegen al cuerpo.
La exposición se compone de obras construidas en capas de madera de distintos espesores, con distintos troqueles y perforaciones, que finalmente suman a un todo armónico que completa la imagen.
Sol dibuja, esculpe y pinta estas obras en madera mezclando paletas de colores, generando tramas abstractas y con movimiento a partir de capas que se descubren visualmente. Juega así con el tamaño, poniendo a disposición del espectador un tejido visual que se recorre desde lejos y desde cerca, revelando las distintas capas que aparecen entretejidas, produciendo un efecto visual cinético.
La luz, la sombra y la posición del espectador harán que la superficie sea dinámica y variable, como el mismo organismo. Las obras se titulan “Hemostasia”, nombre de la primera fase de la cicatrización, que remite al proceso de recuperación de la experiencia vivida por la pandemia y la herida provocada en el cuerpo individual y social.
En esta exposición, Sol Guillon sigue cultivando su manejo tecnológico y el traspaso de planos virtuales 2D a una tridimensional de cuerpos volumétricos. Su lenguaje plástico está basado en la abstracción geométrica, las proporciones y las líneas puras. La fragmentación y la superposición de planos invita a descubrir múltiples significantes y el trabajo en serie sobre un mismo tema, con infinitas variaciones de color, de formas, de líneas, pretende que cada representación haga sentido en distintos observadores.