Partidos de centro-derecha acuerdan que Berlusconi es «la figura adecuada» para ocupar Presidencia
Berlusconi, con 85 años y varios frentes judiciales abiertos, viajó el miércoles a Roma para tantear de primera mano sus verdaderas opciones de convertirse en el próximo presidente de Italia.
Los partidos de centro-derecha de Italia han acordado este jueves que el ex primer ministro de Italia Silvio Berlusconi es «la figura adecuada» para ocupar la Presidencia del país transalpino en sustitución de Sergio Mattarella a partir de febrero.
Tras una reunión en Roma, los líderes de la Liga, Hermanos de Italia, Fuerza Italia, Unión de Centro (UDC), Nosotros con Italia (NCI) y ¡Cambiemos!, que han reafirmado su «propósito de unidad», han apuntado que Berlusconi es el «adecuado» para ser presidente «en esta difícil coyuntura», ya que goza de «la autoridad y la experiencia que merece el país y esperan los italianos».
Por ello, en un comunicado difundido tras la cumbre, que ha durado menos de tres horas, las formaciones de centro-derecha italianas han pedido a Berlusconi que «disuelva de forma favorable la reserva mantenida hasta ahora».
«Las fuerzas políticas de centro-derecha trabajarán para encontrar la más amplia convergencia en el Parlamento», han agregado, antes de subrayar que sus partidos «representan la mayoría relativa en la Asamblea convocada para elegir al nuevo jefe del Estado» y que tienen «el derecho y el deber de proponer una candidatura al más alto nivel de las instituciones».
«La figura del nuevo presidente debe garantizar la autoridad, el equilibrio y el prestigio internacional de quienes tienen la responsabilidad de representar la unidad de la nación», han enfatizado.
Según ha adelantado la agencia de noticias Adnkronos, la semana próxima los partidos de centro-derecha se volverán a reunir, esta vez con Berlusconi, para comprobar los «números» con los que cuenta el ex primer ministro para sacar adelante su candidatura.
Berlusconi, con 85 años y varios frentes judiciales abiertos, viajó el miércoles a Roma para tantear de primera mano sus verdaderas opciones de convertirse en el próximo presidente de Italia, en un escenario donde el nombre que más consenso despierta es el del actual jefe de Gobierno, Mario Draghi, que evita entrar en especulaciones.
Los movimientos se han acelerado en los últimos días, después de que el presidente de la Cámara de Diputados fijase el 24 de enero como día para la elección de un cargo que, pese a ser más simbólico que político, puede marcar el devenir del país en momentos de crisis.
La designación del nuevo presidente recaerá en 1.009 personas –321 senadores, 630 diputados y 58 delegados regionales–. Para ser elegido en alguna de las tres primeras votaciones, el candidato debe obtener al menos dos tercios de los votos (673), mientras que a partir de la cuarta el umbral pasa a la mayoría absoluta (505).
La renuncia de Mattarella a un segundo mandato ha abierto el abanico de opciones sin que haya un aspirante claro. Un 59 por ciento de los italianos apuestan por una figura ajena al enjambre político, en línea con el actual presidente y sus predecesores, según una encuesta publicada este miércoles por el diario ‘La Repubblica’.(Europa Press) –