Crece tensión por actos de violencia en la Araucanía

El Presidente electo, Gabriel Boric, ha trasladado su preocupación por los ataques violentos de este martes que le han costado la vida a un agricultor y a un trabajador forestal en el sur del país, zona donde impera el Estado de Emergencia desde hace ya más de tres meses.

“Nos entristecen y condenamos los asesinatos de César Millahual y Joel Ovalle. Nos preocupan los ataques violentos y las víctimas que ha dejado este conflicto. Para avanzar hacia la paz y la seguridad, necesitaremos la voluntad de todos. Pondremos lo mejor de nosotros en esa tarea”, ha aseverado Boric en sus redes sociales.

Las provincias de Malleco, en La Araucanía, y de Arauco, en el Biobío, fueron escenario de ataques violentos contra un agricultor y un trabajador forestal, quienes finalmente fallecieron. Estos incidentes se dieron en una jornada marcada por la aprobación por parte del Senado de la séptima extensión del estado de emergencia en provincias del sur de Chile.

La Cámara Alta chilena aprobó la medida, impulsada por el Gobierno, por lo que se amplió el Estado de Emergencia hasta el 9 de febrero. La medida de excepción está vigente desde mediados de octubre en las provincias de Biobío y Arauco, en la región del Biobío; y en Cautín y Malleco, en La Araucanía.

El Estado de Emergencia permite el despliegue de las Fuerzas Armadas en estos territorios con el fin de garantizar el control de la seguridad. Por su parte, el Ejecutivo aludió a una mejora sustancial de la situación de seguridad en la zona desde la aplicación de la norma.

Desde la cartera del Interior y Seguridad Pública señalaron que los últimos tres meses han sido “uno de los trimestres con menos violencia en el último tiempo”. Del mismo modo, desde el Ministerio de Defensa remarcaron que, más allá de la cooperación en seguridad, también “hay una labor en materia de desarrollo de coordinación con los alcaldes de estas provincias”.

El gobierno de Boric, según ha trascendido, no renovará el estado de excepción, luego que asuma el 11 de marzo, adoptando una política más abierta al diálogo en la zona.

RESPUESTA DEL EJÉRCITO y FISCALÍA

Por su parte, el general del Ejército, Luis Cuellar, ha calificado de “cobardes” a los responsables de las muertes registradas este martes, y ha instado a los responsables a que se enfrenten a las Fuerzas Armadas chilenas.

“Les digo y repito enfáticamente: aquí hay gente cobarde que mata civiles desarmados ¿Por qué no se enfrentan con nosotros? Los invito”, ha señalado el militar.

Sin embargo, Cuellar ha alertado de que las Fuerzas Armadas son “una fuerza entrenada para combatir en la guerra” y que “no usa munición de fogueo”. “Si a nosotros nos disparan, nuestra gente, que no usa munición de fogueo, va centrar su arma, va a identificar blanco y va a haber bajas, eso es una realidad, va a haber bajas”, ha avisado.

Sus palabras fueron rechazadas por el grueso de la clase política. “Este no es el lenguaje que se espera de un militar chileno”, dijo el director del Instituto de DDHH, Sergio Micco.

Del mismo modo, el fiscal nacional, Jorge Abbott, ha reconocido que “la situación es compleja” y que “cada día” las autoridades tienen que hacer frente a “hechos particularmente graves”, según recoge T13.

Además, ha apuntado que “hay un problema de fondo mayor que requiere una solución que excede, por mucho, la respuesta del sistema penal”, si bien ha remarcado que la Fiscalía está inmersa en esclarecer los hechos y dar con los responsables.

“Nuestra obligación es llevar adelante las investigaciones para poder sancionar a quienes incurren en actos de tanta violencia como los que hemos presenciado en los últimos dos días. Pero eso no va a solucionar el conflicto que afecta a la Macrozona”, ha asegurado Abbott.

En esta línea, el fiscal general ha informado que el ente público ha designado un coordinador para esta zona, que estaría colaborando con las autoridades provinciales para “optimizar los recursos y además intercambiar información de un fenómeno que afecta no solo a una región, sino a cuatro”.

Finalmente, Abbott ha lamentado que, a la par que las investigaciones penales tienen “éxito”, se producen “hechos de mayor violencia”. “Cuando tenemos en prisión preventiva a muchas personas, luego se producen hechos de violencia reivindicando la situación de esas personas”.