Bachelet pide al Consejo de Seguridad de ONU proteger derechos de mujeres y niñas en Afganistán
Bachelet pidió a todos los estados que “utilicen su influencia con los talibanes para fomentar el respeto de los derechos humanos fundamentales".
La Alta Comisionada de la ONU para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, pidió hoy al Consejo de Seguridad «garantizar que los perpetradores de violaciones y abusos» en Afganistán, particularmente contra mujeres y niñas.
«Frente a una catástrofe humanitaria de una escala sin precedentes, el país necesita que toda su gente se una. En cambio, la negación de los derechos humanos de las mujeres y las niñas está dañando enormemente la economía y el país en su conjunto», dijo la funcionaria de la ONU durante una reunión virtual con el Consejo de Seguridad.
Bachelet pidió a todos los estados que “utilicen su influencia con los talibanes para fomentar el respeto de los derechos humanos fundamentales», informó la agencia de noticias AFP.
«Hago un llamado adicional a los estados para que creen vías seguras y programas de reasentamiento para las defensoras de los derechos humanos de las mujeres afganas, y para que pongan fin de inmediato a la deportación de mujeres afganas que buscan protección», añadió la expresidenta chilena.
El encuentro virtual fue convocado por iniciativa de Noruega para desarrollar un debate sobre la violencia contra la mujer en Afganistán.
Desde agosto pasado, con el regreso al poder de los talibanes, «muchas defensoras de los derechos humanos, periodistas, abogadas y juezas afganas se han visto obligadas a huir o esconderse, a menudo tras repetidas amenazas”, detalló Bachelet.
Los talibanes, que desean ser reconocidos por la comunidad internacional, se declararon más moderados que durante su primer mandato de los años 90, pero hay medidas y conductas que continúan siendo parte de una imposición ultraconservadora del islam que señala y aparta a las mujeres y niñas.
Hace dos semanas, el Gobierno talibán ordenó colgar carteles en las tiendas de la capital afgana de Kabul en los que se advierte que las mujeres «deben» taparse con el hiyab, un velo que cubre la cabeza y el torso.
A su vez, los talibanes dispusieron impedir que las mujeres de las provincias sureñas de Balkh y Herat vayan a los hammams, los baños públicos, un espacio muy popular en el mundo islámico, informó la agencia de noticias ANSA.
Además, establecieron que cualquier mujer que desee viajar largas distancias deberá estar acompañada por algún hombre de su familia más cercana y pidieron a los conductores que no acepten mujeres a bordo si no llevan puesto el «velo islámico».
En tanto, en la región de Herat instaron a decapitar a los maniquíes de las tiendas, en una nueva muestra que rechazan la exposición de figuras femeninas en la vía pública. (Télam)