Más de seis millones de refugiados podrían sufrir recortes en sus alimentos en 2022
"Si no se destinan fondos, seremos responsables de un fracaso moral catastrófico. No podemos permitir que otros seis millones de personas desesperadas vean recortadas sus raciones de alimentos esenciales".
La ONG británica World Vision alertó hoy que más de seis millones de refugiados y desplazados se enfrentarán a «graves» recortes en las raciones de alimentos en 2022 si no se produce un aumento inmediato de la financiación.
El mayor socio del Programa Mundial de Alimentos (PMA), World Visión, realizó una revisión de los beneficiarios República Democrática del Congo, Somalía, Sudán del Sur, Tanzania y Uganda, y advirtió que 659.000 personas vieron recortados sus alimentos en una media del 36,3% entre octubre de 2020 y junio de 2021.
Basándose en estas cifras, la ONG predice que otras 6.345.620 personas desplazadas por la fuerza en todos sus programas de seguridad alimentaria podrían enfrentarse a recortes de raciones similares durante el próximo año.
«Debido a los recortes en las raciones de alimentos, ahora nos vemos obligados a reducir las entregas a las familias que las necesitan para dárselas a otras familias que se encuentran en peor situación», dijo el director de ayuda humanitaria de World Vision, Justin Byworth, según informó la agencia de noticias AFP.
La ONG destacó que el impacto de la Covid-19 llevó a los gobiernos donantes a reducir la financiación de la ayuda alimentaria para las personas más pobres del mundo, al mismo tiempo que las necesidades «se disparan».
Durante la celebración del Foro Mundial de Política Humanitaria de la ONU, la semana pasada, World Vision advirtió que muchos refugiados adultos reciben menos calorías al día que las recomendadas para un niño de cuatro años.
En junio de 2021, los líderes del G7 aprobaron su Pacto Mundial para la Prevención de la Hambruna y las Crisis Humanitarias, prometiendo 8.500 millones de dólares para satisfacer las necesidades más urgentes en los países de mayor riesgo.
«Lamentablemente, esos compromisos han tardado en materializarse en forma de recursos en manos de quienes los necesitan desesperadamente», agregó Byworth y explicó que esto significa que el Programa Mundial de Alimentos (PMA) se ve obligado a tomar decisiones «difíciles», como redirigir la ayuda alimentaria de un grupo vulnerable a otro grupo aún más vulnerable, para poder estirar los limitados recursos.
«Y esa ayuda alimentaria tan básica se está recortando y seguirá recortándose a menos que la comunidad internacional cumpla con las promesas anteriores de ayuda alimentaria», advirtió el director de la ONG.
Además, resaltó que las consecuencias de la pandemia, que, combinadas con el impacto de los conflictos y el cambio climático, «ha creado la tormenta perfecta».
«Si no se destinan fondos, seremos responsables de un fracaso moral catastrófico. No podemos permitir que otros seis millones de personas desesperadas vean recortadas sus raciones de alimentos esenciales», concluyó Byworth.
Ahora mismo, se estima que 45 millones de personas están al borde de la hambruna, una cifra que aumentó tres millones desde principios de año.
En 2019, el número que se hizo público fue de 27 millones de personas. (Télam)