Presidente de Perú fustiga a opositores que buscan su destitución
El Congreso unicameral peruano tiene previsto discutir el 7 de diciembre si admite o no a debate el pedido de destitución presentado por tres partidos de derecha.
El presidente de Perú, Pedro Castillo, fustigó a grupos opositores de derecha que promueven su destitución en el Congreso, afirmando que sólo «buscan atentar contra la voluntad popular» expresada en las elecciones de junio pasado, en las que se impuso.
«El objetivo de estos grupos es sacar al presidente sin ningún sustento y con absoluta irresponsabilidad por las consecuencias que estos actos antidemocráticos tienen para nuestra población», expresó Castillo anoche en un mensaje al país por televisión.
El Congreso unicameral peruano tiene previsto discutir el 7 de diciembre si admite o no a debate el pedido de destitución presentado por tres partidos de derecha, entre ellos Fuerza Popular, liderado por Keiko Fujimori.
Para admitir a debate la moción se requiere el 40% de votos a favor entre los legisladores asistentes. Y para remover a un presidente se necesitan los votos de al menos 87 de los 130 congresistas.
No está claro aún si obtendrán los votos para admitir el debate propuesto por los partidos opositores que alegan una supuesta «incapacidad moral» del presidente para ejercer sus funciones.
Castillo, un maestro rural y sindicalista de izquierda que asumió el poder el 28 de julio, afirmó que sus adversarios «no aceptaron el resultado electoral y siempre han buscado atentar contra la voluntad popular».
«Nunca aceptaron que un campesino (…), un maestro dirija la nación y que promueva cambios estructurales en el país», afirmó el mandatario, informó la agencia de noticias AFP.
Castillo también aludió a la revelación de un canal de televisión de que sostuvo encuentros con personas fuera del palacio de Gobierno, lo que le ha valido críticas.
«Han tratado de vincularme con políticos desprestigiados y corruptos de antaño y para manchar mi honor y reputación han buscado asociar al Gobierno del pueblo con actos de corrupción. Frente a ello condeno de manera firme y deslindo de cualquier acto de corrupción», dijo.
Sobre este punto, que no está vinculado a la intentona opositora destituyente, la Contraloría y la Procuraduría General de Perú abrió ayer una investigación sobre las reuniones mantenidas fuera del Palacio de Gobierno con empresarios y funcionarios, y su presunta relación con adjudicaciones realizadas.
Las indagaciones surgen a raíz de un reportaje del programa de televisión ‘Cuarto Poder’, que denunció que Castillo mantenía reuniones en su casa en el distrito limeño de Breña, unas citas que no cuentan con un registro oficial y no cumplen con la transparencia requerida al presidente.
Entre los invitados se encuentran empresarios bajo investigación fiscal abierta y representantes de empresas que se adjudicaron importantes contratos con el Ministerio de Transportes y Comunicaciones, según el programa.
La Contraloría General emitió un comunicado en el que anunció el inicio de investigaciones para verificar las contrataciones o adjudicaciones realizadas.
Asimismo, alertó sobre el «deber de transparencia de la función pública» y reiteró que el marco normativo peruano se establece que «toda autoridad, funcionario y servidor público debe registrar y publicar detalles de sus reuniones y gestiones cuando se sostengan en el ejercicio de su función».
Tras una polarizada campaña electoral, Castillo se impuso en un reñido balotaje en junio sobre Keiko Fujimori, hija del encarcelado expresidente Alberto Fujimori (1990-2000).
La posible destitución de Castillo ronda en el aire desde su elección, cuando Fujimori denunció fraude a pesar del aval dado a los resultados por las autoridades electorales y por los observadores de la OEA y la Unión Europea. (Télam)