Fuerte seguridad y calma en La Habana ante intención de opositores de protestar
Los manifestantes llamaron a vestir de blanco y colgar sábanas blancas en los balcones si acaso no pudieran salir a las calles.
Tres opositores cubanos fueron detenidos luego de que un grupo de activistas reafirmaran su intención de manifestarse hoy contra el Gobierno comunista pese a un fuerte despliegue policial en La Habana y una prohibición de las autoridades, que celebran también en esta jornada el regreso de los niños a la escuela y de los turistas a la isla tras la mejora de la situación sanitaria relativa al coronavirus.
La agencia de noticias AFP y otros medios internacionales dijeron que a lo largo del emblemático malecón costero de esta capital se apostaron casi en cada esquina grupos de tres oficiales, especialmente en el tramo del centro de la ciudad, mientras agentes de la seguridad del Estado vestidos de civil también se desplegaron en plazas y parques.
Pese a la prohibición, el grupo de debate político Archipiélago, con 37.000 miembros dentro y fuera de Cuba, reiteró su llamado a manifestarse en La Habana y seis provincias más a partir de las 15 (las 17 de Argentina), para exigir la liberación de los que consideran presos políticos, el respeto a los derechos humanos y un cambio de sistema político, en concreto una apertura democrática.
Hoy, horas antes del previsto inicio de las protestas, tres activistas opositores fueron detenidos, informaron otros disidentes y AFP.
La activista Martha Beatriz Roque dijo en Twitter que la líder del movimiento disidente Damas de Blanco, Berta Soler, y su marido, el expreso Ángel Moya, fueron arrestados.
Otro disidente, Manuel Cuesta Morua, del grupo Consejo para la Transición Democrática, fue detenido después del mediodía cuando salía de su casa» en La Habana, dijo a AFP su esposa, Nairobi Scheri.
Otro disidente, Guillermo Fariñas, está detenido desde el viernes pasado.
La protesta se dará cuatro meses después de manifestaciones sin precedentes ocurridas el 11 de julio pasado, que dejaron un muerto, decenas de heridos y 1.270 personas detenidas, de las cuales 658 siguen en prisión, según la ONG de defensa de derechos humanos Cubalex.
Los manifestantes llamaron a vestir de blanco y colgar sábanas blancas en los balcones si acaso no pudieran salir a las calles.
El dramaturgo Yunior García, fundador de Archipiélago, que ayer fracasó en su intento de marchar solo con una rosa blanca en la mano, seguía bloqueado en su casa por agentes de la Seguridad, informó AFP.
La periodista Yoani Sánchez, dura crítica del Gobierno, denunció hoy en su cuenta de la red Twitter que “alrededor de la redacción del diario 14ymedio hay un operativo conformado por ´los factores´ (exmilitares y militantes del PCC jubilados, más miembros de los CDR). Además se ven agentes de la Seguridad del Estado vestidos de civil en las salidas del edificio”.
14ymedio es el diario digital creado y dirigido por Sánchez, y los CDR son los Comandos de Defensa de la Revolución, impulsados por el gobierno.
Para el Ejecutivo isleño, el día marca la vuelta a la normalidad tras meses de cierre de las fronteras del país y de las escuelas debido a la pandemia del coronavirus.
«Así amanece Cuba el 15 de noviembre, con más de 700.000 pioneros [alumnos] en las aulas, recibiendo amigos, familiares y turistas, reactivando el quehacer productivo, disminuyendo los casos de Covid», escribió el presidente Miguel Díaz-Canel en Twitter.
El mandatario asistió muy temprano a la reinauguración del curso escolar en una escuela de Ciudad Libertad, un área del oeste de La Habana que en el pasado fue un cuartel militar, ahora convertida en zona escolar.
Ayer, el mandatario denunció la intención de «subvertir el orden interno» y «campañas mediáticas contra Cuba», prometiendo que «Cuba va a vivir en paz», y hoy varios funcionarios postearon en redes sociales fotos de las calles de la isla para resaltar la situación de calma.
Las autoridades acusan a los organizadores de la protesta de ser agentes entrenados y financiados por Estados Unidos para provocar un cambio de régimen, y por eso prohibieron la manifestación y los amenazaron con sanciones penales.
También ayer una carta de unas 40 organizaciones civiles en Cuba y en el extranjero denunció la «ola represiva que se ha intensificado en el país contra sus promotores y los ciudadanos que se identifican con ella».
Desde México, el presidente Andrés Manuel López Obrador se excusó hoy de hablar puntualmente de las protestas, pero destacó la «arrogancia» de Cuba de actuar como un país «independiente» y volvió a criticar el embargo de décadas de Estados Unidos contra Cuba.
«Después de dos siglos de predominio de una política, que un país tenga la arrogancia de sentirse libre e independiente, solo por ese hecho merece toda nuestra admiración y todo nuestro respeto», dijo el mandatario en su habitual conferencia matutina.
López Obrador dijo que el embargo estadounidense es «inhumano».
«Nadie tiene derecho a aislar, a asfixiar a un pueblo, nadie tiene derecho a que mediante esas prácticas se lleve a un pueblo a rebelarse contra su gobierno, eso es vil, canallesco», manifestó el líder mexicano, quien esta semana se reunirá en Washington con su par estadounidense, Joe Biden, y el primer ministro de Canadá, Justin Trudeau.
Y en Bruselas, donde está como parte de una gira por Europa, el expresidente brasileño Luiz Inácio Lula Da Silva también evitó hablar del llamado a manifestaciones, aunque aclaró que «protestar es un derecho de las personas» y por eso a él no le «incomodan» las protestas.
«No he seguido hoy la actualidad en la prensa. De lo que dice usted de Cuba me enteraré cuando termine mis actividades en el Parlamento Europeo”, le respondió el exmandatario a un periodista.(Télam)