EEUU dice que Nicaragua prepara «farsa electoral» y promete más presión sobre Ortega
Estados Unidos también utilizará "absolutamente" todos los instrumentos disponibles, incluyendo sanciones económicas, restricciones de visas y otras medidas punitivas.
Estados Unidos considera que Nicaragua consolidará una «dictadura» con el previsible triunfo de Daniel Ortega el próximo domingo en elecciones, que califica como «una farsa», y que se necesitará todo el peso legal y diplomático para restaurar la vía democrática en el país centroamericano.
«Estas elecciones no tendrán credibilidad, son una farsa», dijo Patrick Ventrell, director de Asuntos Centroamericanos en el Departamento de Estado.
«Vamos hacia el escenario de una dictadura a la que tendremos que responder», afirmó Ventrell durante un foro organizado por el Wilson Center y el Atlantic Council, dos centros de estudios con sede en Washington.
La situación en Nicaragua, donde unos 150 opositores, incluidos siete precandidatos presidenciales, fueron detenidos por «golpistas» y tres partidos fueron ilegalizados, se debatirá la semana próxima en la asamblea general de la Organización de los Estados Americanos (OEA), que podría incluso suspender la participación del país en el bloque regional.
Es «un caso realmente claro de quiebre del orden democrático. Es algo de lo que hablaremos extensamente en esos foros multilaterales porque Nicaragua es realmente una historia aleccionadora», opinó Ventrell.
El funcionario aseguró que el Gobierno de Joe Biden promoverá la coordinación con países afines, como Canadá, la Unión Europea (UE) y socios latinoamericanos y caribeños, para «aumentar la presión» contra «un régimen decidido a aferrarse al poder a cualquier precio», refirió la agencia de noticias AFP.
Estados Unidos también utilizará «absolutamente» todos los instrumentos disponibles, incluyendo sanciones económicas, restricciones de visas y otras medidas punitivas, dijo Ventrell.
Para esto, Biden se apresta a promulgar la Ley Renacer, aprobada anteayer con apoyo unánime de legisladores demócratas y republicanos y que ofrece un arsenal de medidas para abordar lo que el jefe de la diplomacia estadounidense, Antony Blinken, ha llamado «el sombrío camino del autoritarismo» en Nicaragua.
«Hay una variedad de cosas que se pueden hacer», dijo el senador demócrata Bob Menéndez, patrocinador de la iniciativa, llamando a evaluar la suspensión de Nicaragua del pacto de libre comercio entre Estados Unidos, Centroamérica y República Dominicana (Cafta-DR).
La flamante legislación amplía la supervisión de los préstamos de las instituciones financieras internacionales a Nicaragua, luego de que otra ley, la conocida como «NICA Act», de 2018, instruyera a los representantes estadounidenses en el Banco Mundial y el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) a oponerse a nuevos créditos para ese país.(Télam)