Negociaciones a contra reloj en Congreso de EEUU para aprobar proyectos antes de COP26
Dentro del plan de Biden, que contempla un importante gasto social en educación, salud, mercado laboral y clima por 2 billones de dólares, hay objetivos como reducir a cero los niveles de contaminación por emisiones en el sector energético.
Además del plan de inversión de 1,2 billones de dólares destinado a rutas, puentes, puertos, agua potable e internet, Joe Biden busca que el Senado apoye otro programa destinado a “infraestructuras humanas”.
Pese a ser uno de los países más contaminantes del mundo, junto a China y el bloque de la Unión Europea, el presidente estadounidense quiere presentar en la COP26 un Estados Unidos comprometido con la transición energética y el objetivo climático de mantener el aumento de la temperatura global promedio por debajo de los 2 °C.
Dentro del plan de Biden, que contempla un importante gasto social en educación, salud, mercado laboral y clima por 2 billones de dólares, hay objetivos como reducir a cero los niveles de contaminación por emisiones en el sector energético estadounidense para 2035 y hacer que la economía del país sea neutra en emisiones de carbono para 2050.
Para poder financiar estos programas, que podrían alcanzar unos 3,2 billones de dólares en 8 a 10 años, fue presentada hoy la idea de un impuesto a la riqueza y a las carteras accionarias de las grandes fortunas estadounidenses.
«El impuesto sobre los ingresos de los millonarios se aplicaría a unos 700 contribuyentes y permitiría recaudar miles de millones de dólares», dijo el senador demócrata Ron Wyden, responsable de la comisión de Finanzas del Senado, citado por la agencia de noticias AFP.
Eso garantizaría que «las personas más ricas del país paguen una justa parte para financiar inversiones históricas en favor del cuidado de niños, vacaciones pagas y la lucha contra el cambio climático», precisó.
Wyden indicó que «solo aquellos contribuyentes con más de 100 millones de dólares de ingresos anuales o más de 1.000 millones de dólares de activos por tres años consecutivos serían alcanzados» por la propuesta.
Los demócratas intentan alcanzar un acuerdo sobre los programas de inversiones antes de que Biden viaje el jueves a Roma por la cumbre del G20, y luego a la ciudad escocesa de Glasgow, en Reino Unido, donde se realizará este fin de semana la COP26.
Sin embargo, las distintas visiones dentro del Partido Demócrata ponen en duda la aprobación de las medidas ya que el oficialismo tiene una ajustada mayoría en el Senado.
«No me gusta la connotación según la cual apuntamos a personas diferentes, que son gentes que fundamentalmente contribuyeron a la sociedad creando muchos empleos», explicó uno de los legisladores del ala demócrata más liberal, Joe Manchin, uno de los dos congresistas que frenan los ambiciosos proyectos presupuestarios de Biden actualmente en el Senado.
Por su parte, los republicanos acusan al Gobierno de impulsar una política inflacionista con estos programas. Sin embargo, si el oficialismo lograra que sus 50 senadores voten en bloque a favor de los proyectos presentados por la Casa Blanca, la votación terminaría en empate, se activaría el voto de la titular de la cámara, la vicepresidenta Kamala Harris, y no se necesitaría el apoyo de ninguno de los legisladores opositores.(Télam)