Inflación en Alemania registra la mayor alza desde 1974
Asimismo, estas alzas son trasladadas, en parte, al consumidor: la inflación minorista registró un alza de 4,1% en septiembre, el mayor incremento desde fines de 1993.
Los precios mayoristas en Alemania aumentaron 13,2% interanual en septiembre, la mayor suba desde 1974, a causa del alza en el valor de los suministros, según informó hoy la Oficina Federal de Estadística germana (Destatis).
De esta forma, los precios al por mayor continúan en tendencia alcista en la principal economía europea: en agosto, la suba había sido del 12,3% y en julio del 11,3%, de acuerdo con datos recopilados por la agencia DPA.
Si se compara con el mes anterior, los precios en septiembre se incrementaron en un 0,8%, frente al 0,5% intermensual registrado en agosto.
Los aumentos (los mayores desde junio de 1974 en plena crisis del petróleo) se deben, de acuerdo con Destatis, a la fuerte suba de precios de muchas materias primas y productos intermedios, además del arrastre al comparar con meses de 2020 cuyos precios son comparativamente bajos.
Asimismo, estas subas son trasladadas, en parte, al consumidor: la inflación minorista registró un alza de 4,1% en septiembre, el mayor incremento desde fines de 1993.
Uno de los bienes que está empujando al alza los precios es la energía que se situó 14% por encima de hace un año. Por su parte, los alimentos (cuyos commodities se acercan a máximos en 10 años, de acuerdo con la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura) lo hicieron en un 5%, ambos por encima de la inflación general.
La inflación junto con los problemas en los suministros, está afectando tanto a las exportaciones como a la confianza entre los inversores alemanes.
Destatis reportó el viernes último que las exportaciones cayeron por primera vez desde mayo de 2020, debido a la escasez de materiales, que afectaron en particular a la ingeniería mecánica y la producción de automóviles.
Por su parte, de acuerdo con la encuesta mensual del Instituto ZEW publicada hoy, la confianza entre los inversores alemanes cayó por quinto mes consecutivos alcanzando mínimos desde el comienzo de la pandemia de coronavirus.
La caída durante ese mes se debe a los persistentes “retrasos en los materiales y los productos intermedios”, señaló el presidente del ZEW Achim Wambach.
“Según expertos en los mercados financieros, se espera que se reduzcan los beneficios, especialmente en los sectores orientados a la exportación como la manufactura de vehículos, los químicos y las farmacéuticas”, añadió.
En ese contexto, ya se han recortado las previsiones de crecimiento económico para el país: el instituto IFO revisó a la baja la expansión de la economía para este año de 3,3% a 2,5%, mientras que el Instituto Alemán de Investigación Económica (DIW), lo hizo de 3,2% a 2,1%.
“La fuerte recuperación post-pandemia que originalmente era esperada para el verano (boreal), será pospuesta”, señaló el economista en jefe del Ifo, Timo Wollmershäuser, y agregó que “por el momento, la producción industrial registra una contracción como resultado de retrasos en el suministro de importantes productos”.(Télam)