Así enfrenté la pandemia… y salí adelante: Axel Esteban Osses

“El tener más tiempo disponible me dejó espacio para la lectura, escritura y el dibujo, comencé a tomar talleres online y a dibujar más y más y a escribir lo que se acentuó con el tiempo, como si hubiera entrado en una dinámica diferente. Sobre todo el dibujo se convirtió en una actividad incesante, a veces hacía dos o tres dibujos diarios y fui aprendiendo las técnicas digitales, pero especialmente encontrando poco a poco mi estilo propio”, nos cuenta Axel Esteban Osses, quien decidió en el encierro explotar su creatividad.

“Fue una verdadera sorpresa para mí esa forma de expresión que explotó en pocos meses. El dibujo digital se llevaba bien con los tiempos cortos entre reuniones y las actividades del hogar, dándome la posibilidad de experimentar distintas técnicas sin necesidad de comprar o conseguir materiales. A través de Instagram se fue conformando una red de amigos y artistas, encontrando las conexiones con otras personas con intereses comunes con el arte, la pintura, la música, la escritura, sin importar el idioma o el país, la mayoría desconocidos que iba contactando y algunos de los cuáles he podido luego conocer personalmente” nos cuenta este ingeniero civil matemático de la Universidad de Chile, académico en esa casa de estudios y doctor en la Ecolè Polytechnique de París

Cuenta que sus hijos fueron su gran apoyo, lo acompañaron y le dieron ánimo para enfrentar las sucesivas cuarentenas, aunque afortunadamente nunca contrajo el Covid, pero sí le tocó conocer sus efectos devastadores en familiares de personas cercanas.

Al dibujo, sumó un taller de escritura, donde dice que se encontró con “personas muy valiosas y muy buenos y nuevos amigos”. Y agrega: “además del apoyo virtual de la gente que conocía en IG. También el mantener mis estudios de cello y algunos talleres de ilustración online. El apoyo de la universidad que tuvo políticas de traspaso de las actividades presenciales a actividades online y la adaptación y resiliencia de toda una comunidad de estudiantes, funcionarios y académicos. Uno se olvida de agradecer eso”.

Señala que si bien continuará con su trabajo académico habitual en la Universidad de Chile, su reconversión es “para siempre”. “Me encantaría dedicar cada vez más tiempo al arte, el dibujo, la música y la escritura, es un gran misterio como eso ocurrirá, pero creo que será una realidad algún día, pues lo es psíquicamente, en mi fuero interno ya. Una vez que liberas al artista, el artista se queda”.

Consultado sobre qué consejo le puede dar a otros que todavía no encuentran la forma de salir de la crisis, Osses no duda: “Es sin duda una gran oportunidad el detenerse en medio de la vida y reflexionar, incluso aquellos que ya pensaban que lo vivieron todo, con hijos grandes por ejemplo o después de haber experimentado separaciones y pérdidas. Y cómo es que un evento mundial de pronto te deja la puerta abierta a nuevas experiencias y reencuentros con otros y sobre todo, suena cliché pero es abismante y cierto, contigo mismo”.

Respecto a su futuro personal dice que lo toma “con calma, como venga”. “Lo importante es trabajar mucho en eso, dedicarle tiempo y amor al proceso creativo, conectar y estar atento a tus emociones y a las de los demás, escuchar, leer mucho, ponerte en movimiento en todo sentido. Ser humilde en lo que haces, pero apasionado. Hace poco me contactó por IG una curadora de arte, me encantaría hacer una exposición digital y llegar a más personas con este mensaje, ser parte de la humanidad como fuente de creación colectiva”.

Este reportaje, que integra una serie de entrevistas que El Periodista publicará durante octubre, cuenta con el apoyo del Fondo de Medios de Comunicación Social 2021 del Gobierno Regional Metropolitano de Santiago y el Ministerio Secretaría General de Gobierno.