Talibanes siguen tomando ciudades clave mientras EEUU y Reino Unido preparan evacuación
El aplastante avance talibán, que encadenó numerosas conquistas en Afganistán en los días previos, sumó en las últimas horas las ciudades claves de Kandahar y Lashkar Gah, y continúan su ofensiva hacia la capital Kabul mientras Estados Unidos y Reino Unido anunciaron el despliegue de soldados para evacuar a su personal diplomático.
«Kandahar está completamente conquistada», dijo un portavoz talibán en una cuenta oficial de Twitter, una versión confirmada por autoridades y pobladores locales, informó la agencia de noticias AFP.
Poco después, una fuente de seguridad afgana confirmó que los insurgentes tomaron Lashkar Gah, capital de la provincia vecina de Helmand.
La fuente dijo que funcionarios del Gobierno y militares evacuaron Lashkar Gah tras alcanzar un acuerdo con los rebeldes.
Las fuerzas del Gobierno se retiraron masivamente a una instalación militar en las afueras de la ciudad, señalaron testigos.
Antes del anuncio de Kandahar, las desmoralizadas tropas afganas cedieron Herat a los insurgentes, que en apenas una semana tomaron el control de un tercio de las 34 capitales provinciales del país.
Antes habían perdido Ghazni, la capital provincial más cercana a Kabul tomada hasta ahora y que funciona como enlace entre la capital y Kandahar.
En la última semana, el Gobierno perdió casi todo el norte, sur y este de Afganistán, y mantiene el control de la capital y un puñado de ciudades, muchas de ellas en riesgo.
Pese a la retirada de las tropas internacionales, la Fuerza Aérea de Estados Unidos dirigió varias operaciones aéreas para ayudar a las fuerzas afganas a hacer retroceder a los insurgentes en Kandahar.
Estados Unidos y Reino Unido anunciaron el despliegue de soldados para evacuar rápidamente su personal diplomático en la capital.
El Pentágono indicó que 3.000 soldados serán desplegados en Kabul en las próximas 24-48 horas, insistiendo en que no atacarán a los talibanes, mientras que el Gobierno británico anunció el envío temporal de 600 soldados.
«Vamos a reducir nuestra presencia civil en Kabul ante la evolución de la situación de seguridad», dijo el portavoz de la diplomacia estadounidense, Ned Price.
El Gobierno afgano propuso a «los talibanes un reparto de poder a cambio del fin de la violencia», señaló uno de sus negociadores en Doha, donde prosiguen las conversaciones de paz entre Gobierno e insurgentes, iniciadas en septiembre de 2020.
El presidente afgano, Ashraf Ghani, rechazó hasta ahora la idea de un Gobierno que incluya a los talibanes, pero ahora los insurgentes, que antes no descartaban la idea, podrían rechazarla a la luz de los triunfos militares de las últimas semanas.
Desde mayo, cuando comenzó la retirada final de las tropas extranjeras, los talibanes lanzaron una rápida ofensiva contra las fuerzas gubernamentales, que apenas plantaron resistencia.
Los enfrentamientos tienen un costo altísimo en la población civil. En un mes, al menos 183 civiles, entre ellos niños, murieron en Lashkar Gah, Kandahar, Herat (oeste) y Kunduz, y cerca de 360.000 personas huyeron de sus hogares desde principios de 2021, según la ONU.
Por su parte, la UE amenazó a los talibanes con un «aislamiento» internacional si toman el poder «por la fuerza» y les pidió el cese «inmediato» de la violencia.(Télam)