Estado australiano donde queda Sydney endurece confinamiento ante rebrote de Covid-19
El estado de Nueva Gales del Sur y su ciudad más poblada, Sydney, reforzaron hoy las medidas de contención contra el coronavirus, luego de que se reportara un nuevo récord de contagios y pese a que ya regían una serie de medidas para frenar la "diabólica" variante Delta.
Las autoridades sanitarias reportaron 467 nuevos casos de Covid-19 en la última jornada, frente a los 391 notificados un día antes, además de cuatro muertes.
«Durante mucho tiempo, casi un año y medio, fuimos diferentes al resto del mundo. Hasta ahora», lamentó la primera ministra del estado, Gladys Berejiklian, quien destacó que la estrategia eliminación que tuvo un gran éxito el año pasado no parece ser eficaz ante la «diabólica» variante Delta, altamente contagiosa.
Para afrontar esta nueva ola, Berejklian anunció que se reducirá de 10 a cinco kilómetros el perímetro de movimiento a partir de sus respectivos hogares de los habitantes de la zona del Gran Sydney.
Además, aumentarán las multas por infringir las normas de autoaislamiento que se imponen a los casos positivos o los que esperan los resultados de las pruebas y por mentir a la hora de hablar con los responsables de vigilar esa cuarentena.
Habrá una multa también por incumplir las reglas para que solo dos personas hagan ejercicio juntas y por incumplir las reglas para ingresar a la región de Nueva Gales del Sur para realizar trabajos autorizados, inspeccionar propiedades o viajar a un segundo domicilio.
«El aumento de las multas y la mayor presencia policial tienen como objetivo garantizar que las personas que están haciendo algo incorrecto sean capturadas y reciban el castigo pertinente», señaló la primera ministra.
Igualmente entrará en vigor un sistema de permisos para cualquier persona que tenga una razón válida para salir del límite del Gran Sydney y entrar en la región de Nueva Gales del Sur a partir de hoy, informó la agencia de noticias Europa Press.
La región de Nuevas Gales del Sur incluye todo el estado excepto las áreas metropolitanas de Gran Sydney, New Castle y Wollongong.
Allí, el vicepresidente del Gobierno, John Barilaro, también anunció un nuevo confinamiento.
«Para minimizar el movimiento y proteger a nuestras comunidades de la cambiante situación de Covid en Sydney, se impondrán órdenes de confinamiento a partir de esta noche», escribió en Twitter Barilaro.
El funcionario aclaró que las excusas admisibles para salir de casa serán la compra de artículos esenciales, la atención médica o el cuidado, el ejercicio al aire libre con un miembro del mismo hogar o con otra persona, así como el trabajo cuando no se pueda realizar desde casa. Las clases, según Barilaro, serán virtuales, informó la agencia de noticias Sputnik.
Australia logró aplastar la propagación del coronavirus en 2020 con fronteras cerradas y encierros estrictos y en gran parte había regresado a una vida libre de restricciones hasta el brote de Sydney.
Con alrededor de 25 millones de habitantes, el país oceánico registró unos 38.000 casos de coronavirus y más de 900 muertes desde que comenzó la pandemia.
La vacunación,. mientras tanto, avanza lentamente, con un poco más de 15 millones de dosis aplicadas en todo el país, casi 5 millones de ellas administradas en Nueva Gales del Sur.(Télam)