Defensor de DDHH de Haití asegura que comando que mató a Moise no tenía ese objetivo inicial
El director ejecutivo de la Red Nacional de Derechos Humanos (Rnddh) de Haití, Pierre Espérance, aseguró hoy que quienes asesinaron al presidente Jovenel Moise el 7 de julio cambiaron el objetivo de su misión a última hora, y cuestionó las declaraciones de la primera dama Martine Étienne.
«La idea principal no era asesinar a Jovenel Moïse. La misión cambia cuando el comando se encuentra dentro de la casa de Jovenel Moise. No todos los colombianos tenían la misma misión. La idea era dar un golpe de Estado», manifestó Espérance, según informó el portal digital Gazette Haití, citado por Sputnik.
El activista que mantuvo una postura crítica ante el Gobierno de Moise aseveró que en sus últimos minutos de vida el mandatario llamó dos veces al jefe de la Policía, León Charles, y a los responsables de seguridad Dimitri Herard y Jean Raguel Civil, además de Vladimir Paraison, quien fuera expulsado de la guardia presidencial.
También reveló que en la residencia presidencial había una cifra aún por determinar de dinero en efectivo, que incluso podría alcanzar el millón de dólares.
«Había mucho dinero en la casa de Jovenel Moise. Los mercenarios se llevaron una bolsa llena de billetes de Estados Unidos. Estos billetes no fueron contabilizados. Los residentes de la zona de Jalousie recaudaron mucho dinero tras el asalto de la policía. El juez de paz encontró 40.000 dólares y 116.000 gourdes (unos 11.600 dólares) en efectivo a uno de los implicados», dijo el defensor de los derechos humanos.
Espérance aseguró que las declaraciones de la viuda de Moise a la Dirección Nacional de la Policía Judicial, aún no contribuyeron al progreso de la investigación, y difiere de la brindada por sus hijos, aunque no reveló otros detalles.
Martine Étienne de Moise también resultó herida en el ataque y declaró que los atacantes mantuvieron una comunicación telefónica antes de asesinar a su marido.
Además, Espérance denunció la violación de los derechos humanos en los interrogatorios y la «orientación política del caso», en referencia a las órdenes de arresto emitidas por la Fiscalía contra ciudadanos «que no están en flagrante delito», señaló.
El comisionado de Gobierno, Claude Bed-Ford, dictó edictos contra líderes políticos, religiosos, empresarios y exmagistrados, entre ellos la antigua jueza de la Corte de Casación Wendelle Coq, el presidente del partido gobernante Tét Kalé, y el ex primer ministro Paul Denis.
Varias personalidades criticaron las órdenes y las calificaron de persecución política, mientras dudan que la justicia haitiana dicte sentencia en el caso de magnicidio.
La estatal Oficina de Protección del Ciudadano pidió ayer asistencia de Naciones Unidas y recordó que en los últimos 25 años ningún crimen de alto perfil fue resuelto en el país.
La Policía apresó hasta el momento a 44 personas, de ellos 18 colombianos, cuatro agentes y un presunto autor intelectual, el médico haitiano Enmanuel Sanon.(Télam)