Siete estrategias clave para construir la identidad de una empresa
En esta nota, hacemos un recorrido por siete estrategias clave para construir la identidad de una organización empresarial.
La definición de la identidad de una empresa es fundamental, tanto para guiar las acciones conjuntas como para hacer una diferencia frente a la competencia. Su conformación involucra valores, creencias y características específicas, es decir, elementos de la cultura organizacional.
Se trata de un aspecto clave para lograr solidez, pero también una forma de sentar los cimientos de la proyección organizacional en su totalidad. Por eso, es importante definir esta identidad en concordancia con los valores y motivaciones que fundamentan una labor.
En esta nota, hacemos un recorrido por siete estrategias clave para construir la identidad de una organización empresarial.
1. Definir una cultura y valores propios
Como parte de una cultura organizacional orientada a las personas, es importante definir y difundir valores representativos de una empresa.
Se trata de tener claridad sobre los principios y creencias que le dan sentido a la promoción de un producto o servicio. También, son los pilares que definen el funcionamiento interno de la organización.
2. Crear una imagen organizacional
La identidad visual de una empresa es una forma de reforzar estéticamente los principios de base. Por eso, cobran importancia los colores, la postura en las fotografías, los discursos utilizados, etcétera.
Esos aspectos son, también, maneras de vincularse con el público destinatario, ya que las impresiones generan identificación y una experiencia positiva.
3. Recuperar la historia tras la empresa
Entendiendo lo que es la cultura organizacional, podemos concluir que es necesario que haya una historia empresarial que fundamente una determinada identidad.
Con esto nos referimos a recuperar y socializar las motivaciones que dieron origen a una organización y los recorridos llevados a cabo hasta lograr instalarse.
4. Apostar al crecimiento profesional
No se trata solo de definir una identidad, sino de representarla en todos los aspectos, incluidos los vínculos entre los colaboradores y la empresa.
Una forma de lograr un mayor involucramiento del personal con la visión de una organización es fomentar su desarrollo profesional. El aprendizaje constante permite el empoderamiento de las personas y el crecimiento del equipo.
5. Desarrollar una estrategia de comunicación
En primer lugar, es importante desarrollar un sistema de comunicación al interior de la empresa. Esto ayuda a lograr una mayor articulación y fortalecer las relaciones laborales y humanas.
En segundo lugar, es crucial trabajar en la coherencia discursiva tanto a nivel interno como externo. Esto debe reflejarse en los contenidos y comunicaciones.
6. Cuidar el clima laboral
El cuidado del clima de una organización es fundamental, ya que refuerza sus fortalezas o debilidades, según sea el caso, y ello impacta en la solidez de la identidad empresarial.
En ese sentido, es clave propender a la armonía interna, desarrollar comunicaciones positivas y apostar a la escucha y los procesos constructivos es esencial.
7. Crear un documento
Una vez definidos los aspectos clave de la identidad de una organización, es necesario compartirlos con todo el personal real y potencial.
Para lograrlo, es fundamental documentar no solo los criterios básicos y pautas de identificación, sino también las maneras en que estos se reflejarán en los contenidos, productos o servicios y comunicaciones.