Una nueva protesta en Santiago realizada anoche contra el Gobierno de Sebastián Piñera y por la liberación de arrestados en marchas anteriores terminó con 63 manifestantes detenidos, siete agentes de Carabineros heridos y el histórico monumento del general Manuel Baquedano en llamas.
La plaza Baquedano, conocida como Plaza Italia y ahora renombrada por los manifestantes como Plaza Dignidad por haber sido el núcleo del estallido social el año 2019, fue epicentro de una nueva protesta contra el Ejecutivo.
Durante la jornada, algunos de los movilizados prendieron fuego a la estatua del general Baquedano, en un incendio que fue apagado por los Bomberos luego de que Carabineros dispersaran a la fuerza a los manifestantes.
El Ejército reaccionó con un comunicado en el que calificó de «cobardes desadaptados” y “antichilenos» a quienes incendiaron el monumento.
En sintonía, el ministro de Defensa, Baldo Prokurica, condenó «enérgicamente la afrenta a la estatua del general del Ejército, Manuel Baquedano».
«La violencia y la intolerancia no tienen espacio en una sociedad democrática, y deben ser condenadas y rechazadas con la fuerza», indicó en un publicación en su cuenta de Twitter.
Los disturbios también se produjeron en los alrededores de la plaza y las autoridades llegaron a contabilizar a 600 participantes, según informa La Tercera.
El personal policial de Control de Orden Público detuvo a al menos 63 personas, mientras siete Carabineros resultaron heridos, de acuerdo al jefe de la Zona Metropolitana este, Enrique Morás, citado por la agencia de noticias Europa Press.
La Plaza Italia se convirtió en el epicentro del movimiento ciudadano que estalló en el país en 2019 y desembocó en manifestaciones masivas que llevaron al plebiscito de octubre de 2020, el cual inició un proceso constitucional para escribir una nueva carta magna y modificar la actual dictada por Augusto Pinochet en 1980.
Este tipo de manifestaciones se realizan cada viernes, y además de Piñera tiene como foco de las protestas la violencia institucional de las fuerzas de seguridad, especialmente Carabineros.
Varios partidos políticos y líderes sociales solicitaron la desarticulación de Carabineros tras la muerte de un joven artista callejero a manos de un agente hace unas semanas, en un hecho que levantó nuevas protestas en varios puntos del país.