Parlamento chino aprueba polémica reforma del sistema electoral de Hong Kong
El Parlamento chino aprobó hoy casi por unanimidad una reforma del sistema electoral de Hong Kong que dará al Gobierno de China poder de veto sobre los candidatos y le permitirá reforzar el control de la ciudad semiautónoma y restringir el margen de maniobra de la oposición prodemocrática.(Télam)
Pese a las críticas y advertencias de países occidentales, la propuesta recibió 2.895 votos a favor, ningún voto en contra y una abstención durante la sesión de clausura de la reunión anual de la Asamblea Nacional Popular de China, el Poder Legislativo chino.
El texto quedará ahora en manos de un comité legal de la ANP que se encargará de redactar una versión definitiva que deberá ser ratificada después por el Comité Permanente.
Una ronda de aplausos saludó el resultado de la votación en el enorme Palacio del Pueblo, sede del Parlamento en Beijing, informó la agencia de noticias AFP.
Tras el anuncio de la reforma la semana pasada, Londres, Washington y Bruselas habían advertido al Gobierno chino contra un nuevo ataque a la autonomía de Hong Kong y a lo que queda de sus libertades.
El cambio propuesto en el nombramiento de los miembros del Consejo Legislativo (Legco), el Parlamento de Hong Kong, se produce casi un año después de que China impusiera una controvertida ley de seguridad nacional que fue utilizada contra los manifestantes prodemocráticos en el territorio autónomo.
La norma se impuso tras las enormes protestas de 2019 contra la influencia de Beijing en Hong Kong.
Pero el Gobierno del presidente chino Xi Jinping no pudo evitar que una consulta local a finales de 2019 diera una gran victoria a los concejales de distrito de la oposición.
El texto de la ley aprobada no se publicó hoy, pero la agencia de noticias china Xinhua explicó que aumentaría el papel de la «comisión electoral» de Hong Kong, un órgano subordinado a Beijing que ya nombra directamente al líder del territorio y a más de la mitad de los diputados del Consejo Legislativo.
Este mecanismo permitió al Gobierno chino asegurarse mayorías favorables para el Legco desde la retrocesión del territorio en 1997.
La comisión electoral, que pasará de los 1.200 miembros actuales a 1.500, tendrá la capacidad para seleccionar a los candidatos que podrán presentarse al proceso democrático de las elecciones, según la agencia oficial.
El Legco pasará de 70 a 90 miembros, pero Xinhua no precisó si la comisión electoral podrá ahora nombrar a más de la mitad de los diputados de Hong Kong.
La semana pasada, la Unión Europea (UE) advirtió a China que no adoptara esta reforma, diciendo que estaba dispuesta a «tomar medidas» de represalia, mientras Estados Unidos denunció «un ataque directo a la autonomía» de la antigua colonia británica.
El proyecto es «imperativo para mantener una estabilidad duradera en Hong Kong», dijo el domingo pasado el canciller chino, Wang Yi.
En el momento de la devolución a China, Beijing garantizó a Hong Kong hasta 2047 cierta autonomía y libertades desconocidas en el resto del país, que la oposición hongkonesa denuncia están en rápido retroceso.
Pero el Gobierno y los medios chinos llevan semanas repitiendo que es necesaria una reforma para garantizar que solo los «patriotas» puedan dirigir la metrópoli financiera.
El término patriotismo significa «amar a la actual República Popular China dirigida por el Partido Comunista chino», dijo esta semana Song Ru’an, comisionado adjunto del ministerio de Exteriores chino en Hong Kong.
«Los patriotas deben respetar al Partido Comunista Chino», añadió. «Examinaremos si los candidatos cumplen estos criterios».
La jefa del Ejecutivo de Hong Kong, Carrie Lam, detestada por la oposición, se congratuló del voto de los diputados chinos, a los que dio las gracias «de todo corazón».
En septiembre de 2020 las autoridades cancelaron las elecciones para renovar la mitad del Legco, alegando la situación de la pandemia de Covid-19.
El lunes, Lam había insinuado que era probable un nuevo aplazamiento de las elecciones previstas para septiembre debido a los cambios que pide Beijing.
