Matucana 100 estrena ‘Fisura’, una reflexión sobre lo que emerge del caos

Matucana 100 trae Fisura, una obra de danza contemporánea construida a partir de los consensos, del ritmo, la música y el cuerpo. Creada e interpretada por Andrea Gómez, Camila Cavieres y Diana Carvajal, el espectáculo está atravesado por la crisis del modelo actual y el feminismo y convoca al público a un encuentro íntimo.

Se presentará de manera virtual en Matucana 100 y será transmitida desde el 1 al 11 de abril, de jueves a domingo, a las 21 horas.

Chile ha vivido un torbellino de acontecimientos tras el estallido social, la pandemia y la crisis económica y social, lo que ha sido para las intérpretes un pie forzado para la reflexión y el cruce del arte con la realidad que les toca vivir. “Una creación sensible no se puede separar de su contexto, por eso nuestro proceso ha estado marcado por estos momentos históricos”, señala Camila Cavieres.

El público se enfrentará a una obra de danza contemporánea que aborda la relación de los cuerpos en escena. Asimismo, la creación de nuevas formas de organización y lógicas de acción en el estar juntas. Es un mensaje de resistencia: se pueden construir otras formas de coexistir.

Fisura se presenta como una oportunidad, una grieta que genera una apertura y permite ver otros puntos de vista. “Queremos que emerjan reflexiones sobre lo colectivo y el potencial de estar juntas. Que el público se sensibilice y observe las sutilezas y conceptos detonantes con los que trabajamos, para que cada une encuentre su punto de fuga”, cuenta Andrea Gómez.

Las intérpretes han trabajado juntas en los últimos tres años con una metodología de creación horizontal y de colaboración. Es una puesta en escena que da cabida a la intuición, la exploración y la improvisación de nuevas formas de hacer danza. Dentro de su equipo cuentan con asesoras creativas con vasta experiencia, como Nuri Gutés, Macarena Campbell y Rocío Rivera, quien además es diseñadora de vestuario.

En cuanto a la música, el encargado es Gonzalo Valencia, quien desde el primer ensayo ha sido una capa fundamental de la creación. La iluminación, creada por Fernanda González Errada, también busca dialogar con los movimientos de la puesta en escena, aportando todas activamente al resultado final.

Para ellas ha sido crucial trabajar con una perspectiva feminista: sin jerarquías impuestas, sin cuerpos más importantes que otros y validando el no saber.

“Hay prácticas establecidas que a nosotras nos funcionaban para crear danza y ese era el camino fácil. Durante la creación hemos reconocido nuestros patrones de creación y en el proceso hemos buscado formas de fisurarlos. Hemos optado por generar un universo más complejo donde hay muchos caminos de interpretación”, dice Diana Carvajal.

Hoy sus creadoras han apostado por cerrar este ciclo de creación y llevarlo al formato virtual, a pesar de que la obra estaba pensada para realizarse presencial.

Aunque la obra fue pensada para ser presentada en vivo y en directo,En ese sentido, el principal desafío para las creadoras ha sido lograr que todas las capas y sensibilidades que componen Fisura logren traspasar la virtualidad. “Nos interesa generar un encuentro íntimo con el público que traspase el límite de la piel. Además, que invite a anudarse para terminar siendo unas/os con la propuesta.”, asegura Cavieres.