Francia asume responsabilidad por genocidio en Ruanda
Francia "cerró los ojos frente a la preparación" del genocidio de los tutsis en Ruanda en 1994, pero pese a tener una "responsabilidad abrumadora" en las matanzas no fue "cómplice" del mismo, sostiene un informe de una comisión de historiadores creada por el presidente francés, Emmanuel Macron, publicado hoy y saludado cordialmente por el país africano.(Télam)
En el documento, que fue entregado a Macron, se acusa a Francia de haber «cerrado los ojos» pese a las «alertas», pero descarta que haya sido «cómplice» del genocidio que dejó al menos 800.000 muertos, según cifras de Naciones Unidas (ONU).
La comisión encargada del informe, presidida por el historiador Vincent Duclert, podría marcar un punto de inflexión en la relación entre ambos países, deteriorada durante más de 25 años por las controversias sobre el papel de Francia en el exterminio.
Pocas horas más tarde, Ruanda se congratuló por la publicación del informe al considerar que constituye «un paso importante hacia una comprensión común del papel de Francia».
«El gobierno ruandés se congratula del informe de la comisión Duclert, que representa un paso importante hacia una comprensión común del papel de Francia en el genocidio contra los tutsi», declaró el ministerio ruandés de Relaciones Exteriores en un comunicado.
Además, anticipó que «un informe de investigación encargado por el gobierno ruandés en 2017 se publicará en las próximas semanas y sus conclusiones completarán y enriquecerán las de la comisión Duclert».
El documento, de más de 1.000 páginas y realizado en base a telegramas diplomáticos y notas confidenciales, apunta a la responsabilidad crucial del presidente socialista de ese entonces, François Mitterrand (1981-1995), recogió la agencia de noticias AFP.
Mitterrand brindó un apoyo casi «incondicional» al régimen «racista, corrupto y violento» del presidente Juvénal Habyarimana, frente a una rebelión tutsi dirigida desde la Uganda anglosajona, añade el trabajo.
El mandatario socialista tenía «una relación fuerte, personal y directa» con Habyarimana, señalan los 14 historiadores de la comisión creada por Macron.
El informe apunta también a la responsabilidad del Estado Mayor Presidencial (EMP) de Mitterrand, dirigido por el general Christian Quesnot y su adjunto, el coronel y ahora general Jean-Pierre Huchon. Mitterrand falleció en 1996 pero los dos militares, ya jubilados, aún viven.
Cuando estalló el genocidio, Francia «tardó en romper» con el gobierno ruandés, y siguió considerando a la amenaza del partido actualmente gobernante Frente Patriótico Ruandés (FPR) como «el centro de sus preocupaciones», escriben los historiadores.
El genocidio terminó con la victoria del FPR de Paul Kagame, que se convirtió en presidente de Ruanda en julio de 1994.
Desde entonces, Francia mantuvo relaciones tensas con Ruanda, marcadas por la ruptura de nexos diplomáticas en 2006, aunque mejoraron con la llegada al poder de Macron en 2017.