Perú afronta segunda ola con ampliación del toque de queda y médicos estatales en huelga
Médicos estatales de Perú iniciaron hoy una huelga por tiempo indefinido, mientras una entidad profesional afirmó que las unidades de terapia intensiva están “colapsadas” y el gobierno amplió medidas de prevención, entre ellas el horario de vigencia del toque de queda nocturno, ante el sostenido aumento de contagios de coronavirus.(Télam)
Con la medida de fuerza -que no es la primera desde el comienzo de la pandemia-, los médicos procuran mejorar las condiciones de trabajo y de remuneración, según la Federación Médica Peruana (FMP).
“No tenemos materiales, no tenemos suficiente personal, no tenemos logística; si no protestamos ahora, ¿cuándo deberíamos hacerlo?”, dijo el vocero de la FMP, Carlos Valderrama.
“Nos falta continuamente el oxígeno, nos faltan las camas de reanimación, nos falta el material de protección personal; en realidad, nos falta todo”, agregó el dirigente, según la agencia de noticias ANSA.
El presidente de la FMP, Godofredo Talavera, afirmó que la huelga “es responsabilidad del gobierno” porque “no se ha incrementado el presupuesto” y no cumplió compromisos de aumentos salariales firmados en los últimos años.
“Todo el 2020 hemos sido engañados, paseados, y no nos han dado absolutamente nada de la tercera fase; estamos en 2021 y debería iniciar la cuarta fase pero no está presupuestada”, añadió en declaraciones a la radio RPP, durante una manifestación de dos centenares de médicos frente a la sede del Ministerio de Salud.
Por motivos similares, los médicos peruanos ya habían realizado huelgas en septiembre y octubre de 2020, tras suspender una medida similar en julio para comenzar un diálogo con el gobierno que no tuvo resultados satisfactorios.
Talavera aseguró que la medida de fuerza “no afectará” la atención de “las salas de emergencia, las salas de recuperación, las hospitalizaciones ni a los pacientes con sida y cáncer”.
La huelga se realiza en momentos en que Perú afronta una segunda ola de contagios de coronavirus, una semana después de que la ministra de Salud, Pilar Mazzetti, reportara la detección en el país de una nueva variedad de la enfermedad.
En ese contexto, el gobierno anunció una ampliación de las medidas de prevención y volvió a promover la práctica del teletrabajo tanto en el sector público como en el privado.
El toque de queda nocturno fue ampliado en la mayoría de las regiones del país y, según el nivel de alerta -moderado, alto o muy alto- en cada una de ellas, regirá a partir de las 23, las 21 o las 19, en todos los casos hasta las 4, informó la jefa del gabinete, Violeta Bermúdez.
Asimismo, se dispuso reducir la capacidad disponible en el interior de comercios en las zonas de alerta muy alta, a 20% para gimnasios, 30% para centros comerciales y 40% para restaurantes, desde el viernes próximo y hasta el 31 de este mes, dijo el ministro de Producción, José Luis Chicoma, según el diario El Comercio.
En ese sentido, el Colegio Médico del Perú (CMP) pidió al gobierno “la prohibición expresa de actividades de diversión como discotecas, bares, casinos y cines”, así como “encuentros limitados” en el número de personas y “comunicación social efectiva” sobre la enfermedad.
“Queremos evitar una confinación extrema, una cuarentena estricta para todos, a eso no queremos llegar; guardamos ese tipo de medidas para el final porque sabemos que muchos peruanos y peruanas tienen que ganarse la vida todos los días”, explicó el presidente Francisco Sagasti en conferencia de prensa, según la agencia Andina.
Sagasti dijo que “el Gobierno hace lo mejor que puede en circunstancias difíciles”, confió en que antes de fin de mes llegará al país el primer lote -de un millón de dosis- de las vacunas adquiridas al laboratorio chino Sinopharm porque ese es “el compromiso” sellado y deseó que “ojalá antes de que venga el invierno crudo” esté vacunada “la gran mayoría de los que lo necesitan”.
Esta semana, el gobierno anunció la compra de 52 millones de dosis de vacunas contra el coronavirus: 38 millones a Sinopharm y 14 millones al consorcio británico Oxford/AstraZeneca, y prorrogó hasta inicios de marzo próximo el estado de emergencia sanitaria.
Paralelamente, el presidente de la Sociedad Peruana de Medicina Intensiva (Sopemi), Jesús Valverde, afirmó que las unidades de cuidados intensivos están “colapsadas” y que “hoy en día las camas de hospitalización, que eran la reserva de los hospitales, ya se están llenando”.
Sin embargo, Sagasti aseguró en la rueda de prensa que hasta el lunes último la tasa de ocupación de camas de terapia intensiva era de 85%, aunque admitió que viene aumentando paulatinamente desde fines de noviembre “hasta entrar a un terreno ligeramente peligroso”.
El mandatario anunció además que el lunes próximo se reunirá con los miembros del Consejo de Estado -que integran todos los poderes públicos- y con las autoridades electorales para determinar medidas de prevención sanitaria para la campaña para las elecciones generales del 11 de abril próximo.
“Estamos muy preocupados por la posibilidad de que esta campaña también involucre un mayor contagio; vamos a conversar de qué manera podemos asegurar que la campaña electoral pueda realizarse de manera segura”, explicó Sagasti.
Perú acumulaba desde el comienzo de la pandemia 1.040.231 casos confirmados de coronavirus, de los cuales 30.832 personas tenían la infección activa y 38.399 murieron por la enfermedad, según el último balance del Ministerio de Salud, publicado anoche.