Crece el enojo en Europa y Canadá por las demoras en la entrega de las vacunas de Pfizer

"No creo nada de esa mierda" afirmó el Primer Ministro canadiense, Doug Ford, frente a las explicaciones que la empresa de inyecciones dio sobre el retraso.

La pandemia se acerca a los 100 millones de infectados del mundo y dentro de este marco de alza de casos creció también en las últimas horas el enojo en Europa y Canadá ante nuevas demoras en la entrega de las vacunas contra el coronavirus de Pfizer/BioNTech que obligaron a alterar los planes de inmunización.

La Unión Europea (UE) advirtió que buscará aclaraciones de la firma estadounidense, luego de que una cada vez más enojada Italia denunciara hoy un nuevo retraso en el aprovisionamiento de dosis.

El vocero de la Comisión Europea, el órgano ejecutivo de la UE, Eric Marmer, señaló a periodistas en Bruselas que la comisión está en contacto permanente con los laboratorios y enterada de los recientes acontecimientos.

La semana pasada, Pfizer avisó que los envíos de vacunas desde su fábrica de Puurs, en Bélgica, se verían reducidos mientras agranda la planta para poder aumentar la producción de vacunas contra la Covid-19 en 2021.

Esta reducción en la distribución de inoculantes afectó los suministros del bloque europeo, que ahora prevé recibir el 92% de lo que se esperaba para esta semana y la próxima. El 8% restante sería recuperado durante la semana del 15 de febrero.

En ese marco, el Gobierno italiano denunció que Pzifer repetirá la semana próxima la demora en los envíos de vacunas de esta semana, que obligaron a retrasos en la campaña de vacunación.

«Esta semana recibimos un 29% menos de dosis de Pfizer, y nos comunicaron que la semana que viene recibiremos 20% menos», lamentó el comisario especial del Gobierno para la pandemia, Domenico Arcuri.

En consecuencia, el país se vio obligado a posponer el inicio de la vacunación en personas mayores de 80 años, que debían recibir la primera dosis a inicios de febrero y ahora deberán esperar 15 días más, por lo que el Estado italiano empezó la preparación para iniciar acciones legales contra la firma estadounidense, que había prometido unas 475.000 dosis semanales.

Otros países europeos como Dinamarca, Estonia, Finlandia, Lituania, Letonia, República Checa y Suecia criticaron en los últimos días el incumplimiento de Pfizer/BioNTech por los problemas que supone el retraso en una región, donde la campaña de vacunación está siendo más lenta de lo esperado y los positivos se acumulan.

Alemania superó hoy los 50.000 muertos con coronavirus, una cifra «deprimente e inconcebible» que se disparó en semanas recientes pese a que los casos finalmente están bajando tras más de un mes de un confinamiento, informaron hoy las autoridades.

Del otro lado del Atlántico, en Canadá, el mayor general Dany Fortin, responsable de la distribución de las vacunas en el país, señaló anoche que Pfizer aplazó por completo las entregas previstas para la próxima semana y que habrá una disminución significativa en los suministros en las siguientes tres semanas.

El anuncio desató el enojo del gobernador de la provincia más poblada de Canadá, quien dijo no creer en la explicación del retraso dada por la firma estadounidense y advirtió que hay gente que podría morir si sigue incumpliendo sus compromisos.

«Basta. Dennos las vacunas. No me importa lo que estén construyendo, pueden ponerme las excusas que quieran, no me lo trago. Hicimos un pedido, tenemos un contrato, cumplan con las obligaciones del contrato porque hay vidas en peligro», exigió el primer ministro de Ontario, Doug Ford, quien consideró inaceptable que otros países estén recibiendo dosis y Canadá no.

Ford también reiteró un pedido al presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, para que comparta algunas de las dosis de Pfizer hechas en sus instalaciones en la cercana Kalamazoo, Michigan.

«Usted tiene millones de dosis a seis horas de distancia. Su aliado número uno en el mundo necesita su ayuda en este momento y necesitamos que usted dé un paso al frente», arremetió.

El Gobierno federal de Estados Unidos tiene un acuerdo con Pfizer en el que los primeros 100 millones de dosis de la vacuna producidas en el país serán propiedad del Gobierno y no saldrán de ese territorio.

En América Latina, la demora en las entregas provocó la desaceleración del plan de vacunación en México, que el pasado martes recibió un embarque de 220.000 vacunas, la mitad de lo esperado.

Según informó esta semana el subsecretario de Salud de México, Hugo López-Gatell Ramírez, la farmacéutica recortó a la mitad los lotes previstos para este mes, lo que retrasará la primera fase de vacunación del personal médico , mientras que parte de los trabajadores sanitarios deberá esperar una semana más para recibir la segunda dosis.

México registró en las últimas horas nuevos récords de más de 22.000 contagios y de 1.800 muertes por coronavirus.

Por otro lado y pese a estos retrasos, la Organización Mundial de la Salud (OMS) anunció hoy un acuerdo con Pfizer/BioNTech para sumar 40 millones de dosis a su programa Covax que apunta a una distribución más justa de los fármacos, independiente del ingreso de cada país.

«Me enorgullece anunciar que Covax firmó un acuerdo con Pfizer/BioNTech para 40 millones de dosis de su vacuna contra la Covid-19», dijo a los periodistas el director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, en Ginebra (Suiza).

Las dosis de la vacuna -con una eficacia del 95%- se suministrarán «a precio de costo» y deberían entregarse en el primer trimestre, precisó el jefe de Pfizer, Albert Bourla.

Fuente: Télam

Deja una respuesta

Su dirección de correo electrónico no será publicada.

El Periodista