Ya suman 84 las masacres registradas en Colombia en lo que va del año
Colombia fue escenario de 84 masacres en lo que va del año, informó hoy el Instituto de Estudios para el Desarrollo y la Paz (Indepaz), que criticó el accionar del Gobierno por la ausencia de soluciones estructurales a un fenómeno de violencia que, de acuerdo al relevamiento de la ONG, retrocedió a cifras de 2005. (Télam)
En lo que va de 2020 fueron asesinadas 350 personas en 59 municipios de 21 departamentos, reveló Indepaz, que lleva 36 años documentando el conflicto armado interno en Colombia, y destacó que las regiones con mayor número de homicidios en masacres son Antioquia (20) y el Cauca (13).
Para Camilo González Posso, director de la ONG, lo que hay detrás de todos estos asesinatos colectivos cometidos por sicarios son estructuras paramilitares y mafiosas que obedecen a intereses de grupos «muy poderosos».
En esa línea, el investigador criticó las acciones del Gobierno de Iván Duque.
Los funcionarios suelen llegar a a los lugares donde se cometieron las masacres a presidir consejos de seguridad hasta días después del hecho, ofrecen recompensas y se marchan sin proponer soluciones estructurales a un fenómeno de violencia que retrocedió al país a cifras de 2005, manifestó González Posso, replicado por la agencia ANSA.
El investigador comparó las 84 masacres de este año con las 39 que se registraron en 2010, en plena guerra del Estado contra las FARC y los paramilitares, y los ocho crímenes colectivos que sucedieron cuatro años atrás, cuando se firmó el acuerdo de paz.
Para González Posso, si bien los autores suelen ser el Ejército de Liberación Nacional (ELN), disidentes de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) y bandas criminales en disputas por negocios ilícitos, se trata de un fenómeno que si no se detiene y neutraliza, seguirá multiplicándose.
«Aquí en Colombia se ha tenido una práctica de décadas» y es la de «utilizar la masacre como un instrumento para las acciones de control militar y territorial en medio de confrontaciones por recursos», dimensionó.
Este nivel de violencia se mantuvo hasta el final del año.
Las últimas dos masacres registradas fueron cometidas en las últimas horas en el municipio de Caucasia, en el departamento de Antioquia, y en el municipio Maicao, de La Guajira.
El primero de los crímenes múltiples ocurrió en la víspera en zona rural del municipio de Caucasia, cuando hombres uniformados, armados y en lanchas remontaron el río Nechí hasta la pequeña población de Cuturú, y dispararon indiscriminadamente contra los pobladores.
En el ataque, que fue atribuido al «Clan del Golfo», una estructura criminal conformada por paramilitares y narcotraficantes, murieron tres personas y cinco más resultaron heridas.
Según el ministro de Defensa, Carlos Holmes Trujillo, este ataque sería parte de una confrontación entre esa banda y «Los Caparros» por el control de los territorios, el narcotráfico, cultivos ilícitos y la minería ilegal.
Trujillo ofreció una recompensa de 100 millones de pesos (unos 28 mil dólares) por información que conduzca al arresto de los perpetradores.
La segunda masacre, también conocida hoy, sucedió en un barrio del municipio de Maicao, donde dos hombres en motocicletas dispararon contra un grupo de personas que estaba en la calle el domingo cerca de medianoche.
En el hecho fallecieron un niño de 14 años, su padre y otro adulto, de acuerdo a la versión de las autoridades locales, mientras que otra persona resultó herida.