El Sindicato Nacional Interempresa de Trabajadores y los Ingenieros de Ejecución de ENEL, reunidos en torno al SIEP. podrían votar esta semana la huelga legal en la distribuidora, luego que algunas de sus peticiones fueran rechazadas por la empresa que lidera el primo hermano del Presidente Sebastián Piñera, Herman Chadwick.
Los empleados de ENEL, en carta enviada el pasado 10 de marzo, insistieron en una demanda de la negociación colectiva anterior y que no prosperó: «recuperar para los trabajadores de nuestra empresa el derecho a la participación en las utilidades contemplado en la ley laboral, pero que en la realidad se ha transformado en letra muerta al optarse por una obligación alternativa que altera absolutamente la naturaleza de esta remuneración, llamada gratificación».
En las conversaciones de entonces, Chadwick señaló que no podía resolver ese punto porque no lo había tratado con el directorio de ENEL y los trabajadores aceptaron el argumento.
«En el nuevo proceso de negociación colectiva hemos insistido en nuestra misma propuesta anterior, pues como le decíamos anteriormente la gratificación rompe con el concepto bipolar de división entre capital y trabajo, donde unos administran, dirigen y ganan las utilidades que se producen y los otros reciben una remuneración por los servicios prestados. La gratificación nos pone en otra coordenada, la de la asociación, la de la cooperación mutua, concibe la empresa como una comunidad de trabajo que produce un bien y presta un servicio a toda la comunidad nacional e incluso más allá de ella. La verdad es que la empresa es una responsabilidad colectiva”, señala la misiva del Sindicato.
Le hacen ver a Herman Chawick que «Chile, desde el estallido social, ha cambiado y el pasado 25 de octubre ello ha quedado refrendado con la aprobación, cercana al 80%, de la opción por una nueva Constitución», obligándolo a pronunciarse sobre la demanda
«No dudamos que los derechos humanos será la piedra angular de la futura Constitución Política, concepción que proclama la dignidad y el valor de la persona humana, la igualdad de derechos de hombres y mujeres, la aspiración de promover el progreso social y a elevar el nivel de vida dentro de un concepto más amplio de la libertad e igualdad», aseguran.
Luego de referirse a los difíciles tiempos vividos por la pandemia de coronavirus, señalan que aspiran a un cambio de concepción en las relaciones al interior de la empresa y, en general, «en las relaciones en el mundo del trabajo donde prime el respeto a la dignidad de los trabajadores y trabajadoras, terminando con concepciones arcaicas de subordinación y dependencia de estos en relación con los que dominan el factor dinerario. Unos y otros son necesarios y deben primar las relaciones de colaboración y de respeto mutuo, por ello la gratificación como remuneración no es un accidente sino la expresión de superar aquellas concepciones supremacistas de unos en relación a otros».
De esa forma, invitan a Herman Chadwick a encabezar al interior de la empresa «una nueva etapa de ella que permita que los trabajadores tenga una participación en la utilidades de a lo menos un 30% por ciento de aquellas afectas a gratificaciones de conformidad al artículo 47 del Código del Trabajo y que ello así sea establecido en nuestro contrato colectivo» y los instan a que se los invite a exponer esta posición en la Junta General de socios de Enel Chile S.A..
Mañana, al tener nula respuesta a esta carta y dentro del proceso de negociación colectiva, el SIEP podría votar favorablemente la huelga en ENEL.
Que no aflojen y no esperen a última hora.