Ventilación es clave para evitar contagios de Covid-19
Estudios científicos han comprobado que la mayor forma de contagio del Covid-19 es a través de aerosoles, es decir por el aire. De esta forma es importante el uso de mascarillas, el lavado de manos, el distanciamiento físico, pero lo más importante es la VENTILACIÓN.
Por Jose Antonio Pi Grez*
Ya se ha comprobado que en el exterior o espacios abiertos es mucho más difícil contagiarse porque la velocidad del viento generalmente supera el 1m/sy hace que sea muy difícil que el virus se propague por los aerosoles.
En recintos cerrados, con velocidades 10 veces menores (de solo 0.1 m/s) es muy fácil contagiarse. Si bien la máscara ayuda si está bien puesta y seca, también la distancia, se requiere ventilación a tasas de 12.5 l/s algo así como 45m3/h.
Renovar el aire de manera permanente es lo más importante, lo mejor es que sea por medios mecánicos, como extractores de aire y ventiladores que nos aseguran una tasa fija de renovación de aire según lo que la carga de personas o volumen del recinto tengan.
Si no es posible usar ventilación forzada (vía mecanismos), entonces usar una ventilación cruzada, abriendo ventanas, aunque dependeremos de cómo sople la brisa y su velocidad. Estaremos, por lo tanto ,al arbitrio «de la naturaleza», pero siempre será mejor que mantener los recintos cerrados.
En Europa, durante la práctica de un coro con más de 60 integrantes cantando en un recinto cerrado, la mayoría fue contagiada por uno de los integrantes que portaba Covid-19. El integrante infectado pudo contagiar a otros incluso a distancias de 13 metros. El mismo evento fue simulado al aire libre y el contagio bajó a un 5%.
La razón para este tipo de contagios es que, en un recinto cerrado, las partículas pueden quedar suspendidas por minutos e incluso horas y después caer y contaminar superficies. Se ha podido establecer, además, que la calidad del aire es un factor muy importante, mantener un control del CO2 por debajo de las 400 o 500 ppm es un parámetro que nos puede ayudar a reducir el contagio.
Es un dato desde luego y debe cruzarse con otras variables, como la cantidad de personas en un recinto, pero si se mantienen estos índices con el recinto a carga completa, es muy efectivo.
Hoy para mantener bajo los niveles de contagio de Covid-19, nadie debería trabajar en recintos cerrados y sin ventilación, ningún niño debería ir a un jardín infantil, colegio o universidad, si no hay un adecuado sistema mecánico de ventilación y que nos asegure un recambio de aire de 10 veces/hora o de 45m3/h por persona (escoger la mayor), lo mismo para salas de reuniones, iglesias, restaurantes y demás.
Es bueno en edificios de oficinas, revisar manejadoras de aire o centrales de aire acondicionado y confirmar si son capaces de llegar a los caudales de aire indicados o sugeridos. Si esto no es posible, se puede usar un ventilador auxiliar anclado al sistema central y/o ventiladores en línea que efectúen el efecto «posta». Si no es posible, lo que corresponde es reducir la cantidad de personas en los recintos hasta equilibrar caudales y conseguir las tasas de renovación de 45m3/h por persona como mínimo.
Si se puede agregar a los sistemas centralizados purificadores de aire a base de luces ultravioleta y/o filtros HEPA, tanto mejor; y siempre que esta alternativa sea vista por un especialista.
Existen dispositivos especiales para escritorios y espacios reducidos, y recintos más grandes, hay unidades para adherir a los equipos de aire acondicionado del tipo split, de fácil instalación.
Ayudar a reducir los contagios es una obligación moral y nadie se debe restar.
Cada uno dentro de sus posibilidades debe intentar que su lugar de trabajo o de atención de público, salas de clases o restaurantes, solo por nombrar algunos, estén bien ventilados.
Detener los contagios está en nuestras manos. ¡Hagámoslo!
*Trespi Ltda. Expertos en ventilación