Venezuela rechaza informe de ONU que vincula a Maduro con crímenes de lesa humanidad
Especialistas de la ONU presentaron hoy un informe sobre Venezuela que vincula al presidente, Nicolás Maduro, y a varios de sus ministros con posibles "crímenes de lesa humanidad", pero el Gobierno bolivariano rechazó de plano el reporte bajo el argumento de que está "plagado de falsedades".(Télam)
La misión, que no pudo visitar Venezuela por la negativa del Ejecutivo a facilitar sus pesquisas, investigó más de dos centenares de casos y concluyó, en un informe de 443 páginas, que se cometieron ejecuciones extrajudiciales, desapariciones forzadas, detenciones arbitrarias y torturas en el país sudamericano.
«La Misión encontró motivos razonables para creer que las autoridades y las fuerzas de seguridad venezolanas han planificado y ejecutado desde 2014 graves violaciones a los derechos humanos», subrayó más temprano la presidenta de la misión, Marta Valiñas, en un comunicado citado por las agencias de noticias AFP y DPA.
Valiñas agregó que algunas de las violaciones, «incluidas las ejecuciones arbitrarias y el uso sistemático de la tortura, constituyen crímenes de lesa humanidad».
«Lejos de ser actos aislados, estos crímenes se coordinaron y cometieron de conformidad con las políticas del Estado, con el conocimiento o el apoyo directo de los comandantes y los altos funcionarios del Gobierno», acusó.
A su turno, el ministro de Exteriores, Jorge Arreaza, sentenció que se trata de «un informe plagado de falsedades, elaborado a distancia, sin rigor metodológico alguno, por una misión dirigida contra Venezuela y controlada por gobiernos subordinados a Estados Unidos».
Recalcó por Twitter que la publicación de este documento «ilustra la práctica perversa de hacer política con los Derechos Humanos y no política de Derechos Humanos», antes de añadir que el Gobierno ya rechazó la formación de la misión de investigación.
«Desde el 2 de diciembre de 2019 hemos afirmado que no reconocemos ningún mecanismo politizado e inquisidor, creado con fines ideológicos por países con pésimos récords en Derechos Humanos para agredir a Venezuela y tratar de dañar la relación con la oficina de la Alta Comisionada, Michelle Bachelet», añadió.
Arreaza reiteró la «cooperación» de Caracas con el Consejo para los Derechos Humanos de la ONU y argumentó que esta «se ha generado de manera coordinada y constructiva» con la oficina de Bachelet.
«Los avances han sido notorios y así lo ha reconocido Bachelet al anunciar la renovación de la relación», concluyó.
Venezuela vive una larga crisis política que se agravó en 2019 cuando el líder opositor y titular del Parlamento, Juan Guaidó, se proclamó presidente con apoyo del Legislativo argumentando que Maduro usurpó el cargo tras reelegirse en unos cuestionados comicios un año antes.
En julio, Bachelet presentó un informe sobre Venezuela que denunciaba «detenciones arbitrarias, violaciones a las garantías al debido proceso» y casos de «tortura y desapariciones forzadas».
En esta ocasión, la Misión de la ONU en Venezuela investigó 223 casos, 48 de los cuales se examinaron en profundidad en un exhaustivo informe de 443 páginas.
No obstante, esta misión no pudo visitar Venezuela, debido a que «el Gobierno no respondió a las reiteradas solicitudes» y a las restricciones de viaje en vigor debido a la pandemia del coronavirus y realizó 274 entrevistas a distancia, explicó el informe.