Bolivia autoriza medicamento ruso pero advierte que no sirve para el coronavirus
El Ministerio de Salud boliviano informó este domingo la autorización para importar Avifavir, que se usa para la influenza, y también Remdesivir, que se utiliza contra el ébola. (Télam)
El Gobierno de facto de Bolivia autorizó la importación del medicamento ruso Avifavir, pero con la advertencia de que no está demostrado que sirva contra el nuevo coronavirus.
El Ministerio de Salud boliviano informó este domingo la autorización para importar Avifavir, que se usa para la influenza, y también Remdesivir, que se utiliza contra el ébola, pero con la advertencia de que «no cuentan con evidencia científica concluyente para la indicación Covid-19».
Ambos medicamentos solo se podrán adquirir en el país con receta médica y en farmacias autorizadas, subrayó el Ministerio en un comunicado, citó la agencia de noticias EFE.
La autorización fue comunicada después de que varios municipios bolivianos, por su cuenta o través de una federación nacional, anunciaran que comprarán Avifavir a una empresa radicada en el país, Sigma, una vez que esta firma informó que fue autorizada desde Rusia para producirlo en Bolivia.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) rechazó hace varios meses el potencial del Remdesivir ante el nuevo coronavirus, a raíz de ensayos en Estados Unidos de la compañía Gilead, pero el organismo internacional subraya que actualmente ningún medicamento está autorizado para la Covid-19.
La autorización de estos productos farmacéuticos en Bolivia se produce después de que el Gobierno de facto prohibiera supuestos remedios contra la enfermedad como el dióxido de cloro, pese a que lo habían autorizado leyes del Parlamento nacional y de alguna asamblea legislativa regional.
Bolivia reporta 5.398 muertes y 120.241 casos confirmados de la enfermedad, con más de la mitad de ellos recuperados, 69.566, y un descenso de positivos desde hace días, de acuerdo con los datos oficiales.
El país ha entrado en septiembre en una fase que denomina «posconfinamiento» tras más de cinco meses de cuarentena, decretada a fines de marzo cuando aparecieron los primeros casos.