A tres años de la muerte de Joane Florvil: estudio apunta un 54% de discriminación clasista en Twitter
El ‘Barómetro de Percepción de la Migración’ analizó casi 1 millón 500 mil tuits, identificando que más del 14% reflejan discriminación hacia migrantes en general. El colectivo haitiano sobresale como víctima de una mezcla de clasismo y racismo de parte sobre todo de grupos radicalizados de la derecha.
Coincidiendo con el tercer aniversario de la muerte de la migrante haitiana, Joane Florvil, quien fue acusada de supuestamente abandonar a su hija, luego fue detenida y trasladada a la ex Posta Central, donde falleció sin que se aclarara del todo el caso, el Servicio Jesuita a Migrantes, la Fundación Interpreta y el Centro Vives de la Universidad Alberto Hurtado, lanzaron el “Barómetro de Percepción de la Migración”.
Se trata de una investigación que buscó conocer qué y cómo se opina de la población migrante en Twitter, y que se basa en la recopilación y análisis de 1.453.884 tuits con menciones asociadas a temas migratorios en el país entre el 1 de enero de 2018 y el 11 de agosto de 2020. A partir de este universo, se clasificaron aquellos tuits discriminatorios y no discriminatorios y se construyó un índice cronológico que, como una suerte de balanza de la discusión migratoria en esta red social, permite visualizar su dinámica, y la vinculación de sus peaks con determinados hitos políticos y noticiosos.
Y es que entre los principales hallazgos se pudo evidenciar que los períodos con mayor cantidad de menciones discriminatorias se relacionan, por ejemplo, con hechos noticiosos ligados a la población haitiana y con eventos de connotación política. Asimismo, el 14,5% (211.780 mensajes) fueron categorizados como discriminatorios y surgieron de 53.293 autores.
Tomás Lawrence investigador de la Fundación Interpreta, precisa que “es clave Twitter en la discusión sobre migración, porque el 40% de los trending topics se transforman en noticia y son llevados a los medios tradicionales, llegando a personas que no tienen Twitter o que no tienen redes sociales. Esto se hace aún más relevante porque una de cada tres personas se informa únicamente en redes sociales y Chile tiene más de 15 millones de usuarios activos de internet”. Sobre la clasificación de las posiciones frente a la migración, Lawrence explica que “el logaritmo construido logró gran precisión en la clasificación, llegando al 92,1% y, en concreto, categorizó como discriminatorios a aquellos tuits que niegan o cuestionan los derechos migratorios y el arribo de migrantes, o que estigmatizan o inferiorizan a las comunidades extranjeras en el país”.
Sobresale también una gran cantidad de comentarios discriminatorios (54%), asociados con discriminación clasista, relacionada con la “aporofobia”. Por otro lado se expone que la mayoría de las menciones discriminatorias apuntan a temas relacionados a la seguridad, haciendo un vínculo directo entre migración y delincuencia, en contraposición a estudios recientes que derriban este verdadero mito como el del CEP, o el del Servicio Jesuita a Migrantes.
Según Nicolás Rojas, director del Centro Vives, estas relaciones arbitrarias son propias de un grupo específico de nuestra sociedad qué opinaría desde posiciones de extrema derecha, politizando la discusión migratoria. “El estudio identificó que es un sector radicalizado de la derecha más conservadora el que asume como una causa política la denostación de la población migrante y para ellos no valen los datos ni la información científica. Discriminan y generalizan, y más que debatir, sobreideologizan la discusión atacando o defendiendo a gobiernos específicos y construyendo antojadizamente un enemigo común en comunidades particulares, como da cuenta su fijación contra los ciudadanos haitianos”, sostiene el académico.
Cabe apuntar que según información del Departamento de Extranjería y Migración y el Instituto Nacional de Estadísticas, la población haitiana representa el 12,5% del total de personas migrantes que viven en Chile, antecedida de personas peruanas (15,8%) y venezolanos (30,5%).
Percepción contra realidad
Los investigadores indican que, gran parte de esta percepción negativa que se manifiesta en las redes sociales, no necesariamente se condice con la realidad en los distintos ámbitos de convivencia. En este sentido, la directora Social del Servicio Jesuita a Migrantes (SJM), Michelle Víquez, destaca que “en redes sociales muchas veces se puede ver una tendencia a la manipulación en los comentarios racistas o xenófobos para intensificar una sensación de conflicto para fines más bien políticos”.
“Desde el SJM acompañamos en el territorio a diversas comunidades y sabemos que la realidad es distinta a la que se percibe en tribunas como Twitter. Las ollas comunes o diversas acciones para paliar la pandemia, demostraron que es mayoría la gente que valora la diversidad cultural, que en el encuentro real apoyan a otros independiente de su nacionalidad, que trabajan en conjunto, frente a aquellos que tienen manifestaciones racistas”, añade Víquez.
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