Debilidades de la encuesta Cadem: sólo un 22 por ciento responde sus llamadas
Para alcanzar una muestra de 707 casos realizaron más de 3 mil intentos.
Las encuestas teléfónicas, a diferencia de las presenciales (CEP), siempre son cuestionadas, máxime cuando se realizan en periodos especiales y, sobre todo, porque suelen contestarlas los que están convencidos de algo, quieren influir o forman parte de una lista establecida por el encuestador, porque ya sabe que responde. También porque no dan la cara y el encuestador no puede garantizar la edad o situación del encuestado.
Cadem, para entregar sus mediciones semanales, debe llamar a más de 3 mil teléfonos celulares de pre y postpago (según señala en su informe), de los cuales solo responde el 22 por ciento que son los 707 hombres y mujeres mayores de 18 años que componen la muestra.
Según ellos el margen de error de la encuesta que cubriría 198 comunas, la mayoría de ellas (90%) con población urbana, es de «+/- 3,7 puntos porcentuales al 95% de confianza». La CEP, que se realiza presencial, encuesta al doble de casos, no utiliza reemplazos y el nivel de respuesta de sujetos originales, supera el 70 por ciento, confiesa un error muestral en «±3% considerando varianza máxima y un 95% de confianza».
Las 707 personas que responden a Cadem (luego de llamar a 3.242) lo hacen por teléfono y las mil 496 de CEP son entrevistadas «cara a cara, basadas en un cuestionario estructurado».