Ex Concertación llama a alcanzar un poderoso acuerdo nacional
Más de 200 figuras de los gobiernos de la Concertación (1990-2010) y de la Nueva Mayoría (2014-2018) hicieron ayer martes, a través de una declaración pública, un «urgente llamado» a la unidad del país frente a la crisis social que estalló el 18 de octubre, que hasta ahora ha dejado al menos 30 muertos, según informa radio Cooperativa.
La carta, titulada «Es tiempo de un acuerdo nacional», fue firmada por numerosos ex ministros como Soledad Alvear, Mariana Aylwin, Sergio Bitar, Vivianne Blanlot, José Joaquín Brunner, Enrique Correa, Adriana Delpiano, Mariano Fernández, José Miguel Insulza, José Goñi, Osvaldo Puccio, Isidro Solís, Juan Gabriel Valdés, José Antonio Viera-Gallo e Ignacio Walker, entre otras personalidades de la centroizquierda.
En total, fueron 231 firmantes que se definen como «independientes progresistas y exponentes de la centroizquierda democrática» y que postulan un «Acuerdo Nacional 2020-2022» en torno a tres puntos «esenciales»: un «programa social relevante y sostenible», «paz social y orden público» y «recuperación y crecimiento de la economía».
«Las fuerzas políticas y sociales democráticas deberían partir de nuestra historia reciente y reflexionar sobre la conveniencia y oportunidad de un Acuerdo Nacional, pensar la política como arte de encontrar puntos de entendimiento en pro del bien superior de Chile y su pueblo», indican en el documento.
«Ya hay demasiado odio y desconfianza, es hora de ponerles fin y evitar un lacerante enfrentamiento», exhortan los firmantes, además de hacer un llamado al electorado de cara al plebiscito del 26 de abril, que será el primer paso para decidir si se redacta una nueva Constitución y qué mecanismo se utiliza para ello.
«Somos 14,7 millones de chilenas y chilenos habilitados para votar, nosotros tenemos la última palabra para decidir sobre el futuro constitucional de la nación. Es un momento que convoca y motiva a todas las generaciones, todas las visiones ideológicas, todas las culturas, todos los estratos sociales que componen la sociedad. Todos unidos para construir nuestra casa común», señalan.
Hoy arranca, de manera oficial, la campaña para el plebiscito constitucional, una contienda que los expertos auguran crispada y que es la más importante desde aquella que en 1988 puso fin a la dictadura militar.
Los partidos empezarán a desplegar su poderosa maquinaria propagandística a mediados de esta semana y tratarán de convencer a los chilenos de votar a favor o en contra de derogar la actual Constitución, escrita durante el régimen de Augusto Pinochet (1973-1990) y vista por gran parte de la sociedad como el origen de la gran desigualdad que afecta al país por su corte neoliberal.
La propaganda se divulgará de momento casa por casa, en la calle, en la prensa escrita o en la radio, ya que los anuncios en televisión -tan determinantes en el plebiscito de hace tres décadas- solo están permitidos un mes antes del referéndum.
Fuente: Adprensa
Los dinosaurios corruptos.
El cártel mafioso de la ex Concertación, no hace más que repetir la traición cometida contra el pueblo de Chile, cuando en 1989 convocó, de consuno con la dictadura cívico-militar, a votar por las 54 “reformas” a la Constitución de 1980, en el plebiscito del 31 de julio de ese año.
Ahora, vuelve al mismo engaño, proponiendo, con la derecha, una Convención Constitucional totalmente trucha, para “cambiar” la Constitución, que como ellos saben, no cambiará absolutamente nada y ellos podrán seguir usufructuando sus privilegios al quedar enquistados en sus poltronas del Congreso.
Con sus acciones, lo único que están promoviendo es que realmente se produzca, ahora sí, un levantamiento del pueblo con consecuencias imprevisibles, y de las que los únicos responsables serán los líderes de los partidos políticos agrupados en el cártel de la ex Concertación y sus parlamentarios.
Es que el pueblo que se ha manifestado en la calles, ya no aguanta más traiciones y no va a permitir, como ya lo ha expresado, una provocación como la del mentado acuerdo de los bastardos, abyectos, mafiosos, corruptos, cínicos e hipócritas de la casta política, especialmente de los que se autodenominan progresistas o de centro-izquierda como estos exconcertacionistas.
Excelente y clara aceverasion
EL PROBLEMA, ES QUE AHORA NO LES CREEMOS, JUGARON CON NUESTRA CONFIANZA MIENTRAS NOS TRAICIONABAN, POR LO TANTO NO SE MOLESTEN, UDS. NO TIENEN CALIDAD MORAL.