Compañía que publica el Miami Herald, The Kansas City Star y otros periódicos en EEUU se declaró en bancarrota.
La compañía con sede en Sacramento, California, enumeró activos de hasta mil millones de dólares y deudas de más de mil millones en su presentación en Nueva York de su uso del “Capítulo 11″ , como comúnmente se llama a la ley que permite a las empresas en Estados Unidos con problemas financieros reorganizarse bajo la protección del estado.
“Si bien esto es obviamente un hito triste después de 163 años de control familiar, McClatchy sigue siendo una compañía operativa sólida y comprometida con las noticias e información locales esenciales”, dijo Kevin McClatchy, presidente de la compañía que lleva el nombre de su familia desde la época de la Guerra Civil estadounidense.
“Y si bien nos esforzamos por evitar tener que llegar a tomar este paso, no hay duda de que la escala de nuestro plan de pensiones de 75 años, con 10 pensionados por cada empleado activo, es un reflejo de otra era económica”.
McClatchy advirtió que es posible que no pueda continuar con sus negocios debido a tener que pagar una contribución obligatoria de USD 124 millones a su plan de pensiones en 2020. En su comunicado de ganancias del tercer trimestre, McClatchy dijo que el pago creó “un desafío de liquidez significativo”.
McClatchy ha tenido problemas con los costos de las pensiones y en enero firmó un acuerdo con Pension Benefit Guaranty Corp. que le permitió saltarse un pago mientras continuaban las conversaciones para que la agencia se hiciera cargo del plan de USD 1.375 millones. El plan fue subfinanciado por alrededor de USD 535 millones, según un explicó el reporte.
Los posibles nuevos propietarios, si el tribunal acepta el plan propuesto por la compañía, serían liderados por el “hedgefund” Chatham Asset Management LLC. Operarían McClatchy como una compañía privada. Se cancelarían más de 7 millones de acciones tanto de propiedad pública como protegidas de propiedad familiar.
McClatchy Co. dijo este jueves que continuará funcionando normalmente mientras busca la aprobación de su plan de reestructuración bajo la protección de bancarrota del Capítulo 11. Sus 30 salas de redacción locales funcionan como de costumbre.