Expertos Usach concuerdan con interpretación del senador Allamand sobre obstáculo para alcanzar nueva Constitución
Los abogados enfatizan que el pacto alcanzado por los parlamentarios solo tiene alcances políticos, no jurídicos.
Los académicos de la Facultad de Derecho de la Universidad de Santiago, Francisco Zambrano, Luis Bobadilla y Claudio Herrera, confirman lo que señala el parlamentario, pese a las críticas opositoras: en caso que no se logren acuerdos con un quórum de 2/3, fracasa la convención constituyente y termina rigiendo la actual Carta Magna.
Los abogados enfatizan que el pacto alcanzado por los parlamentarios solo tiene alcances políticos, no jurídicos.
“Si no hay acuerdo, la convención fracasa y rige la Constitución”. Esta fue la declaración del senador RN Andrés Allamand, que implica que en caso que no se logre el quórum de 2/3, fracasa la convención que redacta la nueva Carta Magna y termina rigiendo la actual. La opinión del parlamentario provocó críticas en sectores opositores involucrados en el pacto para alcanzar una nueva Constitución para el país.
Sin embargo, para el abogado y académico de la Facultad de Derecho de la Universidad de Santiago, Francisco Zambrano, las declaraciones del parlamentario están en lo correcto desde el punto de vista jurídico. “Si hay un tercio más uno que permanentemente no quiere llegar a un acuerdo, evidentemente que la convención fracasaría y no habría nueva Constitución, sino que regiría la actual”, afirma.
A su juicio del especialista en derecho público, el acuerdo que suscribieron los actores políticos considera tres formas de que la nueva constitución fracase. La primera, que gane el no en el plebiscito; la segunda, que se venza el plazo para que la convención haga la Constitución; y la tercera, que derechamente no se llegue a los acuerdos para redactar la nueva constitución –es decir, los dos tercios-.
“No hay ninguna otra fórmula dentro de los marcos actuales para cambiar la Carta Magna. Las fórmulas tendrán que ser resueltas en los marcos en que se establece la reforma constitucional”, afirma. Opinión que comparte el experto en derecho constitucional y también académico de la Usach, Luis Bobadilla.
Para el Director del Departamento de Derecho Público de la Facultad de Derecho de la Casa de Estudios, “para que ocurra una derogación orgánica sobre una misma materia tiene que haber una disposición que reemplace a la anterior”. “No hay otra alternativa. Si no se logra el quorum de 2/3 para reemplazar algún texto de la Constitución actual, no se puede producir una derogación. Hay que entender que el acuerdo firmado por los parlamentarios no tiene valor jurídico, es solo un pacto de caballeros”, explica.
No obstante, para el Director del Departamento de Derecho Privado de la Facultad de Derecho de la Universidad de Santiago, Claudio Herrera, se deberá tener presente que si en el plebiscito gana la opción no a la Constitución actual, el mandato de la ciudadanía es que, cualquiera sea el obstáculo, al final del proceso se asegure concretar una nueva Carta Magna. “El compromiso de los parlamentarios es netamente político, pero lo que se espera es que eso lo lleven a norma”, concluye.