Inédito encuentro por la educación pública: 500 institutanos se reúnen con los rectores de la U. de Chile

Cerca de 500 estudiantes de Cuarto Medio del Instituto Nacional repletaron este miércoles 9 de octubre el Salón de Honor de la Casa Central de la U. de Chile, lo que obligó a habilitar adicionalmente uno de los patios laterales, para una simbólica e inédita ceremonia que tuvo como objetivo estrechar los lazos y marcar un hito inicial en el apoyo transdisciplinario que la Universidad de Chile comprometió para acompañar al Instituto Nacional.

«Cuando se produce esta interacción entre la U. de Chile y el Instituto Nacional, más que uno favoreciendo al otro, lo que estamos haciendo todos juntos es luchar por una educación pública mejor, porque nosotros entendemos como universidad que, además de la importancia y simbolismo que tiene el Instituto Nacional, si se deteriora, se deteriora la educación pública, y eso nos impacta a las universidades estatales también. Por lo tanto, ustedes y nosotros estamos en la misma lucha, que es la defensa de la educación pública en Chile», enfatizó el Rector Ennio Vivaldi.

De la instancia también participó la rectora del liceo, Lilí Orell, quien destacó el interés de retomar la historia conjunta entre ambas instituciones. «Ambas instituciones hacemos un compromiso de cuidarnos, porque lo que tenemos que hacer que prevalezca la educación pública en Chile en las condiciones que los jóvenes de nuestro país lo necesitan».

En este hito, que contó con la presencia de autoridades tanto de la Casa de Bello como del liceo emblemático, entre ellos, Rodrigo Pérez, presidente del Centro de Estudiantes del Instituto Nacional.

Desde el plantel se detallaron algunos aspectos del acompañamiento institucional que se ha entregado al liceo, como por ejemplo apoyo técnico en los ámbitos pedagógicos, culturales y de bienestar de la comunidad a cargo de distintas unidades académicas de la U. de Chile, además de actividades de extensión y de encuentro, que iniciarán este semestre y que buscan proyectarse en el largo plazo.

Este apoyo transdisciplinar ya comenzó a implementarse a través de instancias de trabajo a la que han asistido representantes de la comunidad escolar, como los jefes de las Unidades Técnico Pedagógicas (UTP), los delegados de la generación de Cuarto Medio y representantes del Centro de Estudiantes del liceo, donde se han definido las prioridades para este trabajo conjunto, que ya había sido recogidas a través de diferentes instancias al interior del establecimiento. Una de las áreas centrales de esta colaboración es la de Apoyo Psicosocial y Convivencia, que se trabaja junto al Núcleo Mileno para Mejorar la Salud Mental de Adolescentes y Jóvenes (IMHAY).

Una historia compartida en el compromiso de construcción de la República

El Instituto Nacional y la Universidad de Chile tienen una relación histórica que se remonta al origen de ambos planteles, siendo la Universidad de San Felipe el antecedente directo.

Así, las instituciones son más que vecinas e incluso en algún momento compartieron instalaciones. La antigua biblioteca que compartieron la Universidad de Chile y el Instituto Nacional en la antigua capilla de San Diego, demolida por orden del gobierno de Ibáñez del Campo, fue un ícono de la relación de ambas instituciones, «pues encarnó la propuesta de una educación pública comprendida como ‘construir de Chile una escuela’, representada por la cultura del libro y la lectura, según dijera Juan Egaña, de acuerdo a una revisión histórica publicada por la directora del Archivo Andrés Bello, Alejandra Araya, junto a Ariadna Biotti y Juan Guillermo Prado.

«Podemos unir a estas dos instituciones como matrices de la educación pública. Yo digo que el Instituto Nacional es la madre de la Universidad de Chile», indicó la historiadora y autora del libro «La Biblioteca del Instituto Nacional y de la Universidad de Chile: matriz cultural de la República de las letras: 1813-1929», Alejandra Araya.