Daniela Catrileo: «No se aprecia la potencia creativa de la cultura mapuche»
La joven escritora mapuche habla de sus orígenes y los de su familia, el sello de su pueblo en su literatura, la resignificación que existe del tema del 90 en adelante y la urgencia que tiene hoy para hacer visible la problemática indígena.
Por montserrat Martorell
Es profesora de filosofía y poeta, autora de Río herido (2016) y ganadora de la beca que entrega la Fundación Neruda en 2011.
Nacida en Santiago en 1987, esta joven mapuche, orgullosa de su etnia y de sus raíces, llegó a la escritura de forma intuitiva y recoge la tradición de grandes autores que le abrieron el camino, como el poeta Elicura Chihuailaf y otros, que han recogido en sus escritos la cosmovisión de su pueblo.
Su primer libro, ya mencionado, recoge aspectos centrales de su vida, la migración mapuche a la periferia santiaguina, algo que resulta muy común para muchas familias de la zona, pero extremadamente literarios para otros mundos
«Partí desde muy niña escribiendo en mis diarios de vida y en una máquina de escribir que me regaló mi mamá. En ese tiempo, tenía como ocho o nueve años y leía algunos libros que encontraba en la biblioteca del colegio al que asistía, porque los pocos que había en mi casa los había devorado. Me pasaba el tiempo de los recreos leyendo y copiando algunos versos o frases en mis cuadernos. La poesía llegó así, de forma intuitiva, pulsional. Al poco tiempo, me inscribí a un taller de literatura que hacía un profe de castellano, ahí empecé a conocer otras voces, ejercicios escriturales y lecturas. Me inventé un seudónimo de poeta y con el taller escribíamos poemas que pegábamos en las murallas del colegio, eso duró hasta octavo», señaló hace algunos años en una entrevista para Biblioteca Viva.
Esta publicación se realiza con el auspicio y apoyo del Fondo de Medios de Comunicación Social del MSGG 2019.