Aldea Paraíso bistró invita a recorrer el Mediterráneo a través de recetas tradicionales con un guiño de autor
Es un singular bistró que ha sido diseñado para ofrecer una experiencia envolvente de sabores y aromas, aportando valor y originalidad a la exuberancia del Barrio Bellavista. Ubicado en una casona remodelada, es de ambiente relajado y cercano, un rincón para disfrutar de la buena mesa con dejos de antaño y calidez de hogar.
Aldea Paraíso bistró, celebra su primer aniversario y presenta una nueva carta compuesta de gustosas preparaciones mediterráneas; una compilación de recetas típicas y caseras que han sido recreadas para deleitar a sus comensales en almuerzos y cenas llenas inolvidables.
Su nueva carta propone un recorrido completo por las distintivas cocinas del Mediterráneo: Italia, España, Marruecos, Grecia y algo de la India, recreando una emulsión inconfundible de sabores que pretenden sorprender bocado a bocado.
“Creemos que nuestra propuesta es creativa, fresca y original: Un proyecto que ha sido diseñado con amor y mucha dedicación, porque lo que nos motiva es ofrecer una cocina honesta en base a recetas inspiradas en el fogón del hogar, siempre con el toque gourmet”, comenta Michelle Groisman Sobocki, socia del restaurante.
Para comenzar, una entretenida variedad de picoteos (o mezze) que va desde los Falafels, un clásico de oriente en salsa de yogurt sobre colchón de lechuga; Trilogía de Tapas; Bruschettas – de berenjena escabechada y queso crema; de anchoa, rúcula y alcaparra, o de mozzarella, morrón y jamón serrano-; Bombones de pollo, aderezados con cilantro, maní y especias; Camarones o Calamares Crocantes, servidos con “Chilli Souce” y “Salsa Tártara”, respectivamente; Tiradito de Salmón, macerado en leche de tigre, crocante de morrones y papayas en cubos, hasta Samosas de origen Indio, rellenas de verduras en juliana, leche de coco, curry amarillo, maní y cilantro.
Son 4 sus ensaladas: Mar Austral – lechugas, rúcula, salmón ahumado, champiñón, palta, sésamo tostado y parmesano en virutas-; Ave del Paraíso -lechugas, berros, rúcula, pollo deshilachado, champiñón asado y cebolla morada-; Caesar -lechugas, suprema de pollo grillada, crutones, queso parmesano, salsa caesar y la Ensalada Campesina, una combinación de arroz integral, huevo, choclo, palta, tomate, lechugas y aceitunas negras de Azapa.
Su propuesta de fondos ofrece una selección de curry de pollo de todos los colores -verde, amarillo o rojo- con auténticas y distintivas salsas de autor. También incluye la clásica Lasagna; un jugoso filete de Salmón con Hummus, o Pad Vie, fetuccinis de arroz con camarones, verduras, paté de camarón, crocante de chalota, maní y cilantro.
Reconocido por sus pizzas a la piedra, ofrece variedades como la Iberia -con jamón serrano, morrón, sevillanas-; la Orgánica – espárragos, choclo, pimientos, aceitunas sevillanas y negras, champiñón-; la de Rúcula – con tocino, aceite de oliva y toques de ajo-; y la Gula -de carne de res con tocino, aros de cebolla, aceitunas verdes-, todas con una base de salsa pomodoro hecha en casa, mozzarella y aceite de oliva, sobre una masa a la piedra crujiente y recién horneada.
Su variedad de postres y delicias es extensa e incluye Sopaipillas Pasadas en invierno, Tarta de Manzana tibia servida con helado de vainila; Brownie con Helado; Parfait de Frambuesas con toques de fresas; también Marquise de Cookies, Budín de Pasas y Caramelo, Mousse de Chocolate Belga y Naranjas o en su preparación rústica, de chocolate negro con praliné de naranjas. Destacan la Crème Brûlée de Té Chai, el Croissant con Nutella y Frutillas Panna Cotta de Whisky y Confit de Frutas, los bocados de Banana en caramelo de Jengibre, y sus originales Sopa Escandinava de Frutos Rojos o Sopa fría de Berries, con dulces toques cítricos y timbal de crema.
Todo esto acompañado de jugos naturales, limonadas aromatizadas, tés y café de especialidad. Su carta de vinos y cervezas ha sido estudiada para ofrecer los mejores maridajes para sus preparaciones.
Ubicado en Constitución #123, en el corazón oriente del variopinto y singular Barrio Bellavista, se encuentra este hermoso restaurant, hoy un concurrido bistró concebido como un oasis de sabores y aromas, que invitan a darse un gusto y compartir con amigos.
Para lograr un ambiente iluminado y espacios íntimos donde compartir su exquisita carta, sus propietarios rescataron una casona centenaria y la remodelaron con gusto. Una apuesta por un diseño de vanguardia y un servicio personalizado para quienes desean comer rico y vivir una grata experiencia de alta cocina.
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